Enfermedades Profesionales en Odontología

Las enfermedades profesionales se definen como estados patológicos que se producen como consecuencia de una tarea continua que realiza el trabajador. Son enfermedades comunes a un grupo de personas que desarrollan un determinado trabajo.

Tipos de Enfermedades Profesionales

• Enfermedades posturales
• Trastornos musculares y/o articulares de las manos
• Enfermedades infecto-contagiosas
• Trastornos circulatorios
• Trastornos de la visión
• Trastornos auditivos
• Estrés
• Problemas sociales

Enfermedades Posturales

Los trastornos más frecuentes se dan a nivel de la columna vertebral (cervical, dorsal y lumbar) debido a posiciones viciosas e involuntarias que se adquieren durante la tarea cotidiana a lo largo de los años. Entre ellos tenemos: desviaciones de la columna vertebral con predominio a un lado u otro (escoliosis, lordosis, cifosis, etc.). Las complicaciones más severas incluyen: artrosis y hernias de disco.

Prevención: Mantener una postura erguida de cabeza y tronco, trabajar cómodos con una buena posición de los pies.

Trastornos Musculares y/o Articulares de la Mano

Se producen debido a la realización excesiva de trabajos manuales durante largas horas de trabajo y a largo plazo. Las manifestaciones de este tipo de trastorno incluyen fatiga muscular, calambres y dolor, pudiendo extenderse a las articulaciones de la mano. El síndrome del túnel carpiano es bien conocido y afecta al grupo de trabajadores que desarrollan actividades valiéndose de la manipulación digital. El primer síntoma es una molestia a nivel del dedo medio con dolor en el centro de la palma de la mano. Luego se pasa a una inmovilidad del dedo medio; si sigue progresando, el síndrome lleva a una imposibilidad de cerrar la mano con muchísimo dolor al intentar hacerlo.

Prevención: Descansar y relajar los músculos de la mano, repartir las horas de trabajo en sesiones más cortas, seguir los principios ergonómicos para la manipulación digital.

Enfermedades Infecto-contagiosas

Las patologías más graves las producen los virus de la hepatitis humana y de la inmunodeficiencia humana, aunque todas producen incapacidades temporarias o hasta la muerte. Para prevenir una infección cruzada en la consulta, debemos aplicar todas las medidas que abarcan la bioseguridad para todos los casos. Debemos actuar como si todos los materiales estuvieran contaminados y todos los pacientes fueran portadores de enfermedades. En cuanto a la higiene, el paso más importante en el laboratorio es la desinfección. Todos los materiales de impresión pueden desinfectarse, al igual que las ceras de mordida, registros, prótesis terminadas y demás.

Trastornos Circulatorios

Pueden comprender la aparición de varices, hinchazón de tobillos y piernas.

Causa: Por estar mucho tiempo trabajando en una misma posición.

Prevención: Consiste en alternar las posiciones, elevar las piernas a unos 30 cm del piso, caminar, usar calzado apropiado y utilizar medias de descanso.

Trastornos de la Visión

El ámbito de trabajo debe contar con una abundante fuente de luz natural y artificial, y de preferencia no tener muchos accesorios de color blanco en el laboratorio. Debemos proteger la conjuntiva ocular de la penetración de partículas extrañas, secreciones y salpicaduras que puedan contener agentes infecciosos. Debemos tener especial cuidado cuando trabajamos con acrílico, ya que puede volar dentro del ojo y es muy irritante, pudiendo llegar a provocar graves ulceraciones de córnea.

Prevención: Utilizar anteojos de protección en un ambiente iluminado.

Trastornos Auditivos

Son provocados por los ruidos de aparatos utilizados en el laboratorio, como el motor colgante, la recortadora, la pulidora y demás elementos. Debemos tener en cuenta que el motor produce intensa frecuencia de vibración. Muchas veces, las personas expuestas a estos tipos de riesgos laborales se acostumbran al ruido y las vibraciones, dejan de percibirlas y, por lo tanto, no son conscientes de los daños que se están provocando al cuerpo.

Prevención: Se recomienda el uso de tapones para oídos. Elegir pulidoras y aparatos que provoquen el menor ruido posible y la menor vibración. Trabajar con fresas centradas cuando utilicemos el motor colgante para evitar exceso de vibración.

Problemas Sociales

Comunicación entre dentista y mecánico: Una comunicación eficaz es garantía de un trabajo realizado con calidad y éxito. Como contrapartida, muchos de los fracasos protésicos se deben a fallas en la comunicación entre los miembros del equipo dental. Estas fallas se traducen siempre en que la prótesis tenga peor calidad y mayor costo.

Obstáculos de la comunicación: Miedo, orgullo, inseguridad, prejuicios sociales, falta de una terminología común, instrucciones poco precisas que prestan a confusión o la intervención de un tercero poco experimentado para la transmisión del mensaje, entre otras cosas.

Accidentes de Trabajo en Odontología

Debemos poder diferenciarlos de las enfermedades profesionales. El concepto de accidente de trabajo nos remite a todo hecho fortuito, que es difícil de prever, ocurrido a empleados y obreros, que produzca lesiones corporales. En una relación de dependencia laboral, también se consideran los accidentes que pudiesen sucederle al empleado durante el trayecto entre su domicilio y el lugar de trabajo, o viceversa. El empleador será el responsable por estos accidentes ocurridos a sus empleados.

Los accidentes de trabajo que nos pueden ocurrir en nuestra área pueden comprender:

• Accidentes eléctricos
• Accidentes provocados por agentes químicos
• Accidentes provocados por agentes físicos

Bioseguridad en Odontología

Es el conjunto de medidas preventivas que deben tomar los agentes de salud para evitar el contagio de las enfermedades de riesgo profesional.

Importancia:

• Por la reaparición de enfermedades consideradas vencidas, como la difteria, la tuberculosis y el cólera.
• Por el aumento del número de personas mayores.
• Por el constante descubrimiento y aislamiento de nuevos patógenos infecciosos.
• La amenaza de infección por el VIH.

Conceptos Clave

• Desinfección: Técnicas o procedimientos para reducir el número de microorganismos patógenos a un nivel que no implique riesgo de infección para el operador ni el asistente.
• Esterilización: Proceso que sigue a la desinfección del instrumental y que mata a todos los microorganismos vivientes. Utiliza procedimientos físicos o químicos. La realiza el odontólogo con el instrumental que estuvo en contacto directo con secreciones y tejidos bucales del paciente.
• Antisepsia: Eliminación de microorganismos potencialmente patógenos de los tejidos vivos, por ejemplo, procedimientos antes de una cirugía: lavado de manos del cirujano.

Infección Cruzada en la Consulta Dental

Transmisión de agentes infecciosos entre los pacientes y el personal en un entorno clínico. Dicha transmisión puede ser el resultado del contacto directo o indirecto.

Cadena de Infección: Para que se produzca la cadena de infección, es necesario que se den las 4 condiciones a la vez:

• Puerta de entrada
• Huésped susceptible
• Presencia de un agente infeccioso o patógeno
• Cantidad de patógenos suficientes

Infecciones Transmisibles en la Consulta y Tratamiento Dental

• Procariontes: Bacterias y algas con una estructura celular muy sencilla.
• Eucariontes: Características celulares observadas en los hongos.
• Virus: Parásitos intracelulares obligados.

Infecciones por Bacterias

• Streptococcus pyogenes: Faringitis, anginas, amigdalitis, escarlatina, fiebre reumática (saliva).
• Mycobacterium tuberculosis: Se transmite por inhalación, ingestión o inoculación. Enfermedad relacionada con las condiciones socioeconómicas como la desnutrición, pobreza y VIH.
• Treponema pallidum: Agente etiológico de la sífilis. Se transmite por la saliva.
• Gonococo: Es una ETS, aunque también se han encontrado portadores asintomáticos con lesiones orofaríngeas.

Infección por Hongos

La especie más común es la Candida albicans. Tiene preferencias por el siguiente grupo de huéspedes susceptibles: personas diabéticas, mujeres embarazadas, lactantes, ancianos, personas con las defensas disminuidas y personas bajo tratamiento prolongado con antibióticos.

• Boca: Se la suele hallar debajo del paladar acrílico de prótesis removibles, en el dorso de la lengua y, en general, en pacientes con mala higiene bucal.
• Labios: Produce escamas e infección.
• Uñas y pliegues de los dedos de manos y pies.
• Órganos genitales y otros menos frecuentes: Bronquios, pulmones, corazón. Vehículo de transmisión: saliva, secreción nasofaríngea.

Infecciones Virósicas

Constituyen el grupo más importante en cuanto a la transmisión de infecciones cruzadas. Todavía no se cuenta con una terapéutica antiviral específica para algunos de ellos. Una vez adentro, utilizan la célula humana para que sintetice sus productos virales y, como resultado, forme nuevos viriones. Entre los patógenos que nos interesan en nuestra área podemos mencionar:

• Herpes simple tipo 1: Puede provocar en el huésped conjuntivitis, lesión oral por medio de secreciones nasofaríngeas contaminadas. La variedad varicela-zóster puede producir varicela, lesión oral en el receptor y zóster.
• Epstein-Barr: Produce la mononucleosis infecciosa. La vía de contaminación es la saliva y la sangre.
• Virus de la rubéola: Puede afectar al niño o al adulto. Los síntomas varían desde una faringitis, lesiones en piel, dolor en articulaciones, hasta una meningitis. La vía de contagio son las gotitas de Flügge.
• Virus de la hepatitis humana: Existen varios tipos: A, B, C, D. Los síntomas más característicos son: ictericia, fiebre, decaimiento, orina oscura, dolor epigástrico. La hepatitis que más nos interesa y es transmitida a través de la sangre, saliva, secreciones, lágrimas, leche materna es la del tipo B. También se contagia por vía sexual y verticalmente. Es 100 veces más contagiosa que el VIH.
  • El tipo A se transmite por agua no potable, alimentos contaminados, utensilios.
  • El tipo C es más común por transfusiones de sangre, vía sexual.
  • El tipo D también por sangre, pero coexistiendo con hepatitis B o con antecedentes de hepatitis B.
• VIH: Afecta a las células del sistema inmunitario y del sistema nervioso central. Los síntomas pueden aparecer en un lapso de tiempo que varía desde varios meses hasta 8 a 10 años desde la entrada del virus al organismo. Estos son: diarrea, sudoración nocturna, fiebre persistente, neuropatías, linfadenopatías. Además, aparecen agentes patógenos oportunistas como pueden ser: cándida, herpes 1 y varicela-zóster, tuberculosis, lesiones en la piel, manifestaciones bucales. Se transmite a través de sangre, vía sexual, de madre a hijo.

Desinfección de las Impresiones

Debe realizarse sistemáticamente en todos los casos y aplicando todas las medidas.

Desinfectantes

• Glutaraldehído: Presenta un alto nivel de actividad contra todas las formas de resistencia patógena. La desventaja es que es tóxico, alergénico y tiene un alto costo.
• Yodóforos: Es un compuesto que contiene yodo más un transportador; este último aumenta la solubilidad del yodo y, a su vez, suministra yodo libre a la solución a medida que se va consumiendo. Presenta una actividad desinfectante baja o media según la concentración del yodóforo. La povidona yodada es la más conocida.
• Hipoclorito de sodio: Se presenta en el mercado con un pH de 12 aprox. y en una concentración de 55gr/l. Para que tenga actividad, necesita diluirse, por lo cual disminuye su pH y comienza la liberación del ácido hipocloroso. Debe ser almacenado en un envase opaco y cerrado, y no más de 45 días porque pierde su actividad. Se utiliza en diferentes concentraciones: al 0,5% para desinfectar instrumental durante 30 minutos y al 0,1% para pisos, paredes y mesadas. Tiene nivel medio de efectividad.