Sistema Locomotor Humano

Articulaciones

Las articulaciones son el conjunto de partes blandas y duras que unen dos o más huesos. ¡Su existencia permite la gran variedad de movimientos que podemos realizar!

De acuerdo a la movilidad que permiten, se dividen en tres clases:

Diartrosis

Son aquellas que permiten gran o buen movimiento. Las más importantes de ellas son:

• Húmero – Escápula (Hombro)
• Húmero – Cúbito, Radio (Codo)
• Radio – Carpo (Muñeca)
• Coxal – Fémur (Cadera)
• Fémur – Tibia (Rodilla)
• Astrágalo – Tibia, Peroné (Tobillo)

Estas articulaciones están formadas por: superficies articulares, cavidad articular, membrana sinovial que produce líquido sinovial y ligamentos.

Anfiartrosis

Permiten movimiento parcial (semimóviles). El medio de unión entre los huesos, en este caso, es cartílago o fibrocartílago.

Las más importantes de estas son: sínfisis púbiana, intervertebrales, sacro – coxal.

Sinartrosis

No permiten movimiento, son inmóviles. Su medio de unión es cartílago o tejido conectivo. La mayoría de ellas reciben también el nombre de suturas y sus mejores representantes son las uniones de los huesos del cráneo.

Movimientos Articulares

Las articulaciones permiten a los huesos realizar varios tipos de movimientos, como son:

• Rotación: girar.
• Pronación: poner la palma de la mano hacia abajo.
• Supinación: poner la palma de la mano hacia arriba.
• Aducción: acercar un segmento hacia la línea media corporal y juntar dedos.
• Abducción: alejar un segmento de la línea media y separar los dedos.
• Flexión: acercar dos segmentos corporales.
• Extensión: alejar dos segmentos corporales.

Músculos

Los músculos corresponden al 40 o 50 % del peso corporal. Según su estructura histológica, se dividen en:

• Voluntarios: Insertos en los huesos, gobernados mayoritariamente por el sistema nervioso voluntario; sus fibras (células) se ordenan formando estrías.
• Involuntarios: Forman parte de la estructura de la mayoría de las vísceras y conductos orgánicos. Sus células se ubican sin seguir un patrón determinado, por ello se les nombra también como músculos lisos (no forman estrías), no forman parte del sistema locomotor y son gobernados por el sistema nervioso involuntario.
• Músculo cardíaco: Su tejido es estriado, pero solo tiene acción sobre el sistema nervioso involuntario. Por eso se le considera como un tipo especial de músculo.

Propiedades de los Músculos

Todo músculo posee las siguientes propiedades o características:

• Excitabilidad: Es capaz de recibir y responder ante un estímulo. Un estímulo es cualquier cambio externo o interno de intensidad suficiente para desencadenar un impulso nervioso. Esto indica que los músculos son activados por el sistema nervioso.
• Contractilidad: Capacidad de acortarse y engrosarse ante el estímulo.
• Extensibilidad: Capacidad de estirarse.
• Elasticidad: Capacidad de recobrar su forma original después de contraerse o extenderse.

Funciones de los Músculos

Los músculos tienen tres funciones importantes: movimiento (evidentes o poco notorios), conservación de la postura y producción de calor.

Sistema Locomotor

Los músculos esqueléticos o estriados tiran de los huesos, que son palancas rígidas, permitiendo así los movimientos del esqueleto. Cada músculo está rodeado de una membrana denominada aponeurosis que le ayuda a insertarse formando prolongaciones llamadas tendones, y además limita su extensión.

Tipos de Contracciones Musculares

• Isotónica: Son las que generan movimientos normales.
• Isométrica: No generan movimiento, solo aumentan la tensión de un músculo (resistencia).
• Espasmódica: Existe en este caso un período de latencia muy breve entre dos contracciones.
• Tetánica: Un segundo estímulo actúa antes de que el anterior haya concluido y así sucesivamente, causando posteriormente una contracción sostenida ya que el músculo no puede relajarse.
• Tono muscular: Corresponde a la contracción de solo porciones del músculo que se van alternando; esto es indispensable para mantener la postura. La pérdida de este tono se denomina flacidez.

Patologías de los Huesos

• Osteoporosis: Es la patología que se caracteriza por una disminución progresiva de la masa ósea (con mayor tendencia a las fracturas) como resultado de una menor actividad de los osteoblastos. Este trastorno se produce en personas de edad avanzada, principalmente mujeres de raza blanca. Entre la pubertad y los años intermedios, las hormonas sexuales estimulan la actividad de los osteoblastos conservando sano el tejido óseo. Al disminuir o cesar dichas producciones, puede empezar la osteoporosis.
• Hernia de discos intervertebrales: Los discos que separan las últimas vértebras lumbares y las del sacro soportan comúnmente más peso que el resto de ellas; esto conduce al debilitamiento o lesión de los ligamentos anteriores y posteriores de los discos, lo que facilita su desplazamiento y, al presionarse el núcleo pulposo, se rompe el cartílago fibroso que lo rodea y entonces el núcleo pulposo puede sobresalir en sentido posterior o en dirección de uno de los cuerpos vertebrales adyacentes. Se le conoce también como hernia del núcleo pulposo (NP).
• Fracturas: Se entiende por tal, cualquier discontinuidad del tejido óseo. Su principal causa son los traumatismos, pero también pueden ocurrir por una sobrecarga repetida que el hueso resulte incapaz de soportar y como consecuencia de patologías que debiliten el hueso, tales como: neoplasias, osteomielitis, osteoporosis u osteomalacia.
• Luxación: Corresponde al desplazamiento de un hueso desde su cavidad articular con posible daño de los ligamentos, tendones y cápsula que la conforman.
• Esguince: Es la lesión de las partes blandas que se insertan en una articulación (ligamentos, músculos, tendones, vasos y nervios) como consecuencia de una sobrecarga que excede su capacidad.

Fracturas, esguinces y luxaciones presentan signos y síntomas comunes tales como: dolor, tumefacción, incapacidad funcional del miembro afectado, hematomas (si existe compromiso de vasos) o heridas (si el hueso sale al exterior en una fractura); todo lo cual puede conducir al shock del afectado.

• Curvaturas anormales: Por la acción de diversos factores, las curvas normales de la columna se intensifican o la propia columna se inclina hacia alguno de los lados.
• Escoliosis: Es el encorvamiento lateral de la columna en el nivel torácico.
• Cifosis: Es la intensificación de la curva torácica.
• Lordosis: Es la intensificación de la curva lumbar de la columna.

Trastornos de las Articulaciones

• Reumatismos: Es un término genérico que abarca cualquier trastorno doloroso de las estructuras de sostén del cuerpo, es decir, de ligamentos, huesos, articulaciones, tendones y músculos. La artritis es una forma de reumatismo por ser la inflamación de las articulaciones.
• Artritis reumatoide: Es una de las formas más comunes de inflamación articular. La articulación se hincha, hay dolor e incapacidad funcional. El trastorno comienza con la inflamación de la membrana sinovial, que se engruesa y produce mayor cantidad de líquido, el que se acumula generando una presión que causa dolor espontáneo a la palpación.
• Artritis gotosa: Las personas que padecen este trastorno producen cantidades excesivas de ácido úrico (desecho proveniente del metabolismo de los ácidos nucleicos), o no lo excretan en forma normal, por lo cual se acumula en la sangre, para luego reaccionar con el sodio de ésta y transformarse en cristales que se depositan en los tejidos y las articulaciones, irritando el cartílago de ellas, causando inflamación con mucho dolor. Esta patología, a la larga, puede destruir todos los tejidos articulares provocando la fusión de los huesos comprometidos y la consecuente inmovilidad de ellos.

Trastornos de los Músculos

• Fibrosis: Es la formación de tejido conectivo fibroso en sitios en que normalmente no está presente. Los músculos esqueléticos y cardíacos no cuentan entre sus funciones la mitosis y, por tal razón, al morir sus células, normalmente las reemplaza el tejido conectivo fibroso. Por tal motivo, es frecuente que la fibrosis sea consecuencia de lesiones o degeneración musculares.
• Fibrositis: Es la inflamación del tejido fibroso. Si aparece en la región lumbar recibe el nombre de lumbago. Es un trastorno común que se caracteriza por dolor, rigidez o molestias en el tejido fibroso, especialmente en el que recubre músculos. Los ataques de fibrositis suelen ser consecuencia de lesiones, esguinces repetidos o tensión muscular prolongada.