1-La clasificación de las plantas se realiza de acuerdo con la presencia, ausencia y forma de órganos fundamentales, como raíces, tallos, hojas, flores y frutos, o de acuerdo con la presencia de uno o dos cotiledones en la germinación de la semilla. Esta clasificación basada en las estructuras morfológicas y características particulares de cada planta permite identificarlas hasta el nivel de especie.
Las plantas se clasifican en: plantas sin flor y plantas con flor.
Plantas sin flor: son aquéllas que no producen flor, por ejemplo, helechos, colas de caballo, musgos, pinos, abetos y cipreses (se dividen en briofitas, pteridofitas y gimnospermas).
Plantas con flor: son aquéllas con flores complejas que suelen ser llamativas, las semillas están recubiertas por un fruto que las protege. De ellas se obtiene un gran número de materias primas y productos naturales. Por ejemplo, encinos, manzanos, orquídeas (se llaman angiospermas).
4-En las flores se pueden diferenciar cuatro estructuras particulares denominadas verticilos, que son: … El gineceo: es la estructura más interna. Está compuesta por los carpelos, que se reúnen en una estructura conocida como pistilo, la cual se encarga de producir y contener los gametos femeninos, macroesporas u óvulos.
5-Cutícula es un término utilizado para la capa externa de tejido de basidiocarpo de un hongo, o «cuerpo de fruta». El término alternativo pileipellis significa «piel» de un «tope», en latín, y «tope» significa «hongo», y podría ser técnicamente preferible, pero es tal vez demasiado complicado para el uso popular.
6-Se encuentran en las partes verdes aéreas de la planta, particularmente en las hojas, donde pueden hallarse en una o ambas epidermis, más frecuentemente en la inferior. Su número oscila entre 22 y 2.230 por mm2. Las raíces no presentan estomas.
7-El trabajo del sistema circulatorio se centra en mover la sangre, los nutrientes, el oxígeno, el dióxido de carbono y las hormonas alrededor de todo el cuerpo. Está formado por el corazón, la sangre, los vasos sanguíneos, las arterias y las venas.
El sistema digestivo está formado por una serie de órganos conectados, que permiten descomponer y absorber la comida, y deshacerse de los residuos. Incluye la boca, el esófago, el estómago, el intestino delgado, el intestino grueso, el recto y ano. El hígado y el páncreas también juegan un papel importante en el sistema digestivo ya que producen zumos que ayudan a descomponer los alimentos, la bilis y el zumo pancreático.
El sistema endocrino consiste en ocho glándulas principales que secretan hormonas hacia la sangre. Estas hormonas viajan a diferentes tejidos regulando funciones corporales como el metabolismo, el crecimiento y la función sexual.
El sistema inmunológico es la defensa del cuerpo contra bacterias, virus y otros patógenos que puedan ser perjudiciales. Incluye los nodos linfáticos, el bazo, la médula ósea, los linfocitos, el timo y los leucocitos, glóbulos blancos de la sangre.
El sistema linfático incluye los nodos linfáticos, los conductos linfáticos y los vasos linfáticos, y también juega un papel importante en las defensas del cuerpo. Su trabajo principal consiste en crear y mover la linfa, un fluido claro que contiene los glóbulos blancos de la sangre que ayudan al cuerpo a luchar contra una infección. El sistema linfático también elimina el exceso de fluido linfático de los tejidos corporales y lo devuelve a la sangre.
El sistema nervioso controla las acciones voluntarias (movimiento consciente) y las involuntarias (movimiento inconsciente como respirar), y manda señales a diferentes partes del cuerpo. El sistema nervioso central incluye el cerebro y la médula espinal. El sistema nervioso periférico está formado por los nervios que conectan cada parte del cuerpo con el sistema nervioso central.
Función de nutrición[editar]
Los seres vivos tienen la capacidad de intercambiar con el medio que les rodea materia y energía. Toman del medio las sustancias nutritivas y la energía que necesitan para vivir y expulsan al medio las sustancias de desecho que fabrican. Hacer la función de nutrición supone que los seres vivos realicen los siguientes procesos:
- Ingestión. Es la entrada de la materia al interior del ser vivo. En muchos casos los alimentos no pueden ser utilizados directamente y sufren un proceso denominado digestión por el que se transforman en sustancias reutilizables por las células.
- Metabolismo. Conjunto de reacciones químicas que ocurren en el interior de todas las células de un organismo y que permiten obtener la energía y los materiales necesarios para vivir. Existen dos tipos de metabolismo: el catabolismo y el anabolismo.
- Excreción. Expulsión de materia hacia el exterior. Podemos distinguir dos procesos: la excreción, es decir, la expulsión de sustancias de desecho del metabolismo, como el dióxido de carbono, la orina y el sudor; y la secreción, es decir, la expulsión de sustancias útiles para el organismo como las lágrimas, la saliva, etc.
Función de reproducción[editar]
Es la capacidad de los seres vivos de crear nuevos seres semejantes en su anatomía y en su fisiología a sus progenitores. Todos los organismos poseen esta capacidad, necesaria para que la especie siga existiendo. La función de reproducción no es fundamental para la supervivencia de un ser vivo. Sin embargo la reproducción es fundamental para el mantenimiento de la vida misma, ya que si los seres vivos no se reprodujeran las especies se extinguirían y con ellas, la vida.
Hay dos grandes tipos de reproducción: la reproducción asexual y la reproducción sexual.
- La reproducción asexual se produce cuando no intervienen células especializadas y no hay intercambio genético, por lo que los descendientes son genéticamente idénticos a su progenitor.
- La reproducción sexual se produce cuando intervienen células especializadas (gametos) de diferente sexo y ocurre una mezcla de la información genética contenida en ellas.
Mediante la reproducción los progenitores crean nuevos individuos, sus descendientes. Es decir, la continuidad de la especie depende de la transmisión, de progenitores a descendientes, de unas determinadas características que se heredan de generación en generación.
9- El Sistema encargado del sostén y movimiento es el Sistema Osteo-Artro-Muscular, que incluye un conjunto muy diverso de estructuras que, en forma coordinada, producen todos los movimientos del cuerpo, desde los más amplios como caminar o extender un brazo, hasta los más finos y precisos, como los de las manos al escribir o de la cara al gesticular.
Los principales órganos encargados de estas funciones son los huesos y los músculos esqueléticos.
Los huesos se relacionan entre sí mediante articulaciones. Los músculos esqueléticos se asocian a los huesos directamente o a través de estructuras fibrosas muy fuertes: los tendones.