Afecciones Testiculares y Prostáticas: Un Estudio Completo

Patologías de la Próstata

Prostatitis Bacteriana Aguda

Causada por Escherichia coli. Los microorganismos llegan a la próstata por extensión directa a partir de la uretra o de la vejiga, o por vía hematógena o linfática, desde lugares más distantes. También puede ocurrir por cateterismo o manipulación quirúrgica de uretra o próstata. Se caracteriza por la presencia de:

  1. Un infiltrado inflamatorio (neutrófilos)
  2. Aumento celular
  3. Edema del estroma

Hiperplasia Prostática Benigna (HPB)

Se presenta en el 20% de los hombres a los 40 años, en el 70% a los 60 años y en el 90% a los 70 años. La dihidrotestosterona (DTH), un metabolito de la testosterona, constituye el mediador final del crecimiento de la próstata. Se requieren dos factores para que se presente la HPB:

  1. Presencia de DTH
  2. Envejecimiento

La glándula se encuentra agrandada por nódulos de tamaño variable surgidos en la zona de transición. Estos nódulos pueden comprimir la luz uretral, contribuyendo a la obstrucción de la misma.

Patologías de los Testículos

Criptorquidia

Ausencia de descenso testicular en el escroto, unilateral o bilateral. Normalmente, los testículos descienden a través de los canales inguinales al escroto durante los dos últimos meses de vida intrauterina y terminan de bajar al nacer. Varios factores, como anomalías congénitas, hormonales, obstrucción del canal inguinal e idiopáticos, pueden interferir en el descenso testicular normal. Se asocia con atrofia tubular, esterilidad y un aumento del riesgo de padecer cáncer testicular.

Atrofia Testicular

Disminución del volumen y/o peso de los testículos o forma anormal. Se reduce el funcionamiento normal de los testículos y la producción de espermatozoides. Puede deberse a distintas causas, como criptorquidia, estadio final de la orquitis inflamatoria, malnutrición, obstrucción de la salida de semen, administración prolongada de hormonas sexuales femeninas, etc.

Torsión Testicular

Patología muy dolorosa, cada vez más frecuente. Se produce de forma secundaria a un retorcimiento del cordón espermático, con la consiguiente obstrucción sanguínea. Hay dos tipos: en el neonato y en el adulto. Si se soluciona antes de 6 horas, hay probabilidades de que el testículo sea viable. Según la duración y gravedad del trastorno, las alteraciones van desde la congestión y hemorragia intersticial a la necrosis hemorrágica grave. Los hallazgos citológicos:

  • En las primeras horas después de la torsión: hemorragia reciente.
  • Tras 4-5 días: aparecen túbulos seminíferos necróticos y reacción inflamatoria aguda (neutrófilos abundantes).

Patologías Infecciosas

Tuberculosis Testicular

  • Reacción inflamatoria granulomatosa del testículo más frecuente.
  • Suele comenzar con una epididimitis, con afectación secundaria del testículo.

Los cambios histológicos incluyen:

  • Inflamación granulomatosa
  • Necrosis caseosa (se forman coágulos y el órgano toma aspecto de «requesón»).

En la citología aparecen:

  • Células inflamatorias abundantes
  • Espermatozoides
  • Restos celulares

Sífilis

Infección venérea crónica causada por la espiroqueta Treponema pallidum, microorganismo transmitido durante las relaciones sexuales. En caso de sífilis congénita, se transmite de la madre al feto a través de la placenta.

Orquitis

Inflamación de uno o los dos testículos. Por lo general, se produce como complicación de una infección ascendente de las vías urinarias bajas en pacientes no tratados. Puede estar causada por virus o bacterias.

Lesiones de la Túnica Vaginal Testicular

Hidrocele

Acumulación de líquido seroso en el interior de la túnica vaginal testicular. Es común en bebés recién nacidos. Se produce inflamación y lesión testicular.

Hematocele

Acumulación de sangre en el interior de la túnica vaginal testicular que rodea al testículo. Es secundario a un traumatismo, torsión o hemorragia, invasión neoplásica, etc. Doloroso.

Quilocele

Acumulación de linfa en el interior de la túnica vaginal, secundaria a obstrucción linfática.

Espermatocele

Acumulación de semen en el cordón espermático, por lo general en el interior de un conducto dilatado o en la cabeza del epidídimo. Indoloro.

Varicocele

Dilatación de las venas del cordón espermático que drenan los testículos, las cuales se vuelven tortuosas y alargadas. Es más frecuente su aparición en el testículo izquierdo debido a que la vena espermática izquierda desemboca en la vena renal izquierda en vez de en la cava, que tiene un calibre mayor, como hace la espermática derecha. Este hecho favorece el reflujo y la dilatación venosa.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *