El sistema nervioso y la coordinación hormonal

Sistema Nervioso Central

El sistema nervioso central, integrado por el encéfalo y la médula espinal, está protegido por unas envueltas membranosas llamadas meninges y por estructuras óseas: el cráneo, en el caso del encéfalo, y las vértebras, en el caso de la médula.

Estructura del Encéfalo

El encéfalo está alojado en la caja craneana. Lo forman el cerebro, el cerebelo y el bulbo raquídeo.

Cerebro

Aparece dividido en dos hemisferios. Su superficie presenta salientes llamados circunvoluciones y endiduras llamadas surcos o cisuras. La parte más externa o corteza cerebral está formada por la sustancia gris. La corteza cerebral recibe la información de los órganos de los sentidos y elabora las órdenes de respuesta. Asimismo, almacena y procesa la información. En la zona más interna se encuentra la sustancia blanca.

Cerebelo

Situado debajo del cerebro, se divide en dos hemisferios y muestra una serie de circunvoluciones cerebelosas. El cerebelo coordina movimientos y nos permite mantener el equilibrio.

Bulbo Raquídeo

Enlaza el encéfalo con la parte superior de la médula espinal. El bulbo controla de forma automática importantes funciones corporales.

Médula Espinal

Se halla alojada en el interior de la columna vertebral. La parte más externa se compone de sustancia blanca. La médula es una vía nerviosa a través de la cual ascienden mensajes al encéfalo y por donde descienden las órdenes desde el encéfalo al resto de los órganos. De ella parten 31 pares de nervios raquídeos o espinales.

Alteraciones en el Sistema Nervioso

El sistema nervioso es sensible a dos tipos de alteraciones: orgánicas y psíquicas.

Trastornos Orgánicos

  • Golpes que pueden provocar lesiones irreversibles en el encéfalo o la médula.
  • Obstrucción o rotura de arterias cerebrales que provocan lesiones debidas a la muerte de las neuronas por falta de riego sanguíneo.
  • Enfermedades infecciosas que afectan al sistema nervioso central, como la meningitis.
  • Enfermedades degenerativas como la demencia o el mal de Alzheimer.

Trastornos Psíquicos

Como la ansiedad o la depresión, son alteraciones en el funcionamiento del sistema nervioso y, por tanto, en el comportamiento. Se suelen relacionar con la existencia de factores ambientales agresivos.

El Mal de Alzheimer

El Alzheimer es una enfermedad degenerativa producida por la destrucción del tejido nervioso de la corteza cerebral. Comienza a manifestarse con la pérdida de memoria (amnesia) y con dificultades en el lenguaje, como la falta de palabras. En un estado avanzado se producen cambios importantes en la personalidad del paciente y la imposibilidad de este para reconocer personas u objetos. El cerebro de un enfermo de Alzheimer ve y oye perfectamente, pero no sabe reconocer esas imágenes ni esos sonidos.

La Coordinación Hormonal

El organismo posee un segundo sistema para coordinar sus funciones: el endocrino u hormonal, constituido por un conjunto de glándulas.

Las glándulas son órganos formados por células especializadas en fabricar y segregar sustancias. Se pueden clasificar en:

  • Endocrinas: fabrican unas sustancias denominadas hormonas que vierten a la sangre.
  • Exocrinas: vierten sus secreciones al exterior del organismo o al tubo digestivo y, por lo tanto, no forman parte del sistema endocrino.
  • También hay glándulas mixtas que, además de producir otras sustancias, también producen hormonas.

Hormonas

Son específicas: cada hormona actúa sobre determinadas células llamadas células diana, especialmente programadas para responder ante su presencia.

Son muy eficaces: una mínima cantidad de hormona es suficiente para que esta cumpla su función.

Su producción está controlada: el exceso o déficit en la cantidad de una hormona produce enfermedades características.

El Equilibrio Hormonal

La actividad endocrina está controlada por la hipófisis, la glándula directora del sistema hormonal.

La hipófisis es una pequeña glándula del tamaño de un guisante situada en la base del cerebro que controla el funcionamiento de otras glándulas.

Mecanismo de Acción de la Hipófisis

  1. La hipófisis fabrica una serie de hormonas llamadas trópicas que son vertidas a la sangre.
  2. Cuando las hormonas trópicas llegan a otras glándulas endocrinas, estimulan la secreción de la hormona correspondiente (en este caso, la tiroxina).
  3. El aumento excesivo de la cantidad de una hormona, como la tiroxina, en la sangre inhibe a la hipófisis, que cesa la producción de las hormonas trópicas.
  4. La falta de hormonas trópicas inhibe a su vez a la glándula correspondiente y se interrumpe la producción de la hormona en exceso.

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