Ovarios: cáncer
Suele presentarse en mujeres mayores de 50 años. Este cáncer es difícil de detectar con anticipación; 1 de cada 7 mujeres tiene esta enfermedad. Es el tercer cáncer más frecuente del aparato reproductor femenino. Los síntomas no aparecen hasta que está bien diseminado. Se puede detectar por ecografía, tomografía axial, resonancia magnética y análisis de sangre. Se desconocen las causas.
Síntomas: sensación de peso en la pelvis, dolor en el abdomen, hemorragias vaginales, cambios de peso, periodos menstruales anormales, dolor de espalda, gases, náuseas y vómitos.
Prevención: mujeres con muchos hijos o mujeres que han tomado anticonceptivos.
Síndrome del ovario poliquístico
Es cuando los ovarios o glándulas suprarrenales femeninas producen más hormonas masculinas de lo normal. El resultado es el desarrollo de quistes en los ovarios. Es más propenso en mujeres obesas.
Síntomas: infertilidad, dolor pélvico, vello en la cara, pecho, abdomen, pies y manos, calvicie y acné. No existe cura.
Testículos: hidrocele y varicocele
Hidrocele: presencia de líquido dentro del escroto. Esta acumulación de líquido puede ser en uno de los lados o en los dos (hidrocele bilateral). No es una amenaza de vida, para curarlo se debe acudir a una operación. Síntomas: dolor y pesadez en el escroto.
Varicocele: dilatación venosa que drena la sangre de los testículos y se encuentra contenida en el cordón espermático, que es la estructura que contiene la vía seminal, las arterias y venas del testículo. Síntomas: pesadez y crecimiento del escroto.
Hipófisis: acromegalia
Enfermedad crónica en personas de edad mediana, causada por una secreción excesiva de la hormona de crecimiento que es producida en la glándula pituitaria después del completo crecimiento del esqueleto. Este aumento es debido a un tumor benigno. La acromegalia se confunde con el gigantismo en los niños.
Síntomas: debilidad, fatiga, dolor de cabeza articular, agrandamiento de pies, manos, mandíbula, lengua y piel, aumento de peso. La acromegalia se puede controlar con fármacos.
Tiroides: hipertiroidismo
Aumento de concentración de T3 y T4. Síntomas: inquietud, irritabilidad, pérdida de peso, sudoración, taquicardia, osteoporosis, onicólisis, etc. Tratamiento: tiroidectomía (extirpación de la tiroides), suministro de yodo oralmente para que destruya la glándula, medicamentos que bloquean la secreción de hormonas de la tiroides.
Páncreas: diabetes mellitus
Enfermedad crónica que aparece por la falta de insulina del páncreas. La insulina es una hormona que mantiene los valores de azúcares en sangre. Las posibilidades de contraerla aumentan en los 60 años.
Síntomas: frecuencia en orinar, hambre inusual, debilidad, cansancio, sed, pérdida de peso, cambios de ánimo, malestar estomacal, vómitos, picazón, elevados niveles de azúcar en sangre y orina.