Fisiología Humana: Sistemas Nervioso, Locomotor y Endocrino

Función de Relación

Vista

  • Desde el punto de vista óptico, el punto de enfoque (allí donde se forma la imagen) está más allá del ojo, en lugar de sobre la retina.
  • Astigmatismo: trastorno que consiste en la formación de imágenes borrosas, consecuencia de irregularidades en la curvatura de la córnea.

Todos los problemas que puede tener el cristalino pueden encontrarse también en cualquier aparato que tenga lentes artificiales. Por ejemplo, podemos tener un telescopio con astigmatismo.

Oído

El sentido del oído está formado por tres regiones:

  • Oído externo: la parte visible. Formado por el pabellón auditivo y, además, el conducto auditivo externo.
  • Oído medio: situado a continuación. Se inicia con el tímpano, una membrana que capta las vibraciones que han entrado dentro del oído y las transmite a un conjunto formado por tres huesecillos: martillo, yunque y estribo.
  • Oído interno: los tres huesecillos del oído medio pasan las vibraciones a la cóclea, un órgano en forma de tubo en espiral que está lleno de líquido. En su interior se encuentran las células que detectan las vibraciones gracias a unos cilios que oscilan en función de los movimientos del líquido en el interior de la cóclea.

En el oído interno se ubican también las estructuras que permiten el equilibrio. Se trata de una región situada sobre la cóclea, llamada vestíbulo, y de tres canales semicirculares, situados justo encima del vestíbulo.

  • El vestíbulo se divide en dos partes (sáculo y utrículo) y se ocupa del equilibrio estático (sin movimiento). Se encarga de mantenernos derechos y en posición normal.
  • Los canales semicirculares se encargan del equilibrio dinámico (cuando hay movimiento). Además, nos informan sobre la posición en que está nuestra cabeza durante un movimiento para ayudarnos a mantener la postura.

Gusto

El sentido del gusto se encarga de captar información sobre la composición química de un alimento. Nuestro sentido del gusto se encuentra ubicado en las papilas gustativas, pequeñas estructuras llenas de receptores que detectan aspectos sobre la composición de las sustancias que llegan a la boca. Distinguimos cinco sabores básicos (los cuatro tradicionales; dulce, salado, ácido, amargo; más un quinto, llamado umami).

Olfato

El olfato también analiza sustancias químicas. En este caso, detalla aquellas que se encuentran mezcladas con el aire que entra en la nariz. Durante la alimentación, el sentido del olfato complementa la información recogida por el sentido del gusto, noción que entendemos como sabor. Sólo hay cinco gustos, pero los sabores son muchos más, porque son combinaciones de gusto y olfato.

El olfato es uno de los sentidos más antiguos de los humanos, por consiguiente, se encuentra íntimamente conectado a partes muy primitivas de nuestro cerebro, lo que permite la existencia de vínculos subconscientes entre el olfato y nuestras reacciones. No toda la información olfativa se recoge y analiza de forma consciente. En el caso de las feromonas, por ejemplo, la sustancia se detecta y provoca una reacción en nosotros, pero no somos conscientes de ello.

Tacto

El tacto es un sentido que se distribuye por toda la superficie de nuestra piel. Se encarga de informar sobre los contactos que nuestro cuerpo hace con elementos que lo rodean. Aunque hay receptores del tacto en todo el cuerpo, su distribución no es regular. Tenemos más receptores en las regiones del cuerpo que hay que proteger porque son muy sensibles (como la cabeza y el cuello), en las regiones que suelen entrar en contacto con superficies, o bien sirven para manipular y conocer el entorno (como los pies y las manos), o en áreas vinculadas al placer sexual.

Dolor

Los receptores del dolor están ubicados por todo el cuerpo; no se encuentran únicamente en la superficie del cuerpo, sino también en su interior, tanto en músculos como en órganos internos. De todas maneras, la zona en la que se encuentran de manera más abundante es la piel, donde proporcionan información sobre elementos que están causando o pueden llegar a causar un daño al organismo. El dolor suele provocar reacciones instintivas de autoprotección.

Temperatura

Hay dos aspectos diferentes de la temperatura que nuestro cuerpo es capaz de detectar:

  • Temperatura del entorno: se detecta a través de receptores situados en nuestra piel (diferentes a los del dolor o tacto). Estos receptores proporcionan una información consciente sobre la temperatura de aquello que nos rodea, de lo que cogemos, etc.
  • Temperatura interna del cuerpo: se detecta para mantener nuestra temperatura alrededor de los 36,5 ºC. La información recogida por los sensores internos de temperatura se percibe de forma consciente, pero sirve para generar respuestas y mantener nuestra temperatura estable.

Propiocepción

Es nuestra percepción interna inconsciente. Está formada por una red de receptores situados en las articulaciones del cuerpo que se encargan de dar información sobre nuestra postura. Esta información, combinada con la información que aporta el sentido del equilibrio, nos da una información precisa sobre dónde se encuentra cada parte del cuerpo en cada momento (tanto en el absoluto como en relación con el resto de partes). Esta información se procesa de forma inconsciente, como muchas otras informaciones relativas a nuestra presión sanguínea, necesidades de oxígeno o niveles de glucosa.

Sistema Nervioso

El sistema nervioso es el encargado de captar información sobre el entorno mediante los receptores, procesarla con el fin de elaborar una respuesta, y conducir esta respuesta a los órganos efectores. Los órganos efectores son aquellos que ejecutarán la respuesta, los cuales pertenecen a dos grupos básicos: músculos y glándulas.

Neuronas

La neurona es la pieza fundamental que constituye el sistema nervioso, es la célula encargada de construir la red que conecta a los receptores con los efectores, así como los circuitos que analizan y generan respuestas. Nuestro sistema nervioso está formado por, aproximadamente, 1011 neuronas (100.000.000.000).

Partes de una neurona

Una neurona está formada por tres elementos básicos:

  • Dendritas: una o más ramificaciones encargadas de captar los estímulos, ya sea directamente del exterior (en el caso de una neurona que actúe como receptor) o bien en forma de impulso transmitido por otra neurona.
  • Soma: el «cuerpo» de la neurona, donde están sus orgánulos. Al soma llegan los impulsos captados por las dendritas, y de éste salen los impulsos en dirección al axón.
  • Axón: una ramificación (en este caso siempre única) encargada de conducir el impulso desde el soma en dirección a su extremo, con el fin de pasarlo a otra neurona, o bien a un efector (en caso de tratarse de la última neurona de la cadena).

Sinapsis

La sinapsis es la forma de comunicación entre dos neuronas. Las neuronas no están físicamente conectadas, sino que existe un pequeño espacio entre ellas (de aproximadamente 20 nm). La transmisión del impulso nervioso de una neurona a otra se hace a través de estos espacios.

  • El proceso empieza cuando un impulso nervioso que ha hecho el recorrido por todo el axón de una neurona (que llamamos presináptica, porque está antes de la sinapsis) llega a su extremo. Allí la neurona tiene vesículas llenas de una sustancia que se llama neurotransmisor. Existen diversas moléculas que funcionan como neurotransmisores. El tipo de efecto sobre la neurona que recibe el impulso dependerá del tipo de molécula que utilice la neurona como neurotransmisor.
  • El contenido de las vesículas se vierte en el espacio que hay entre la neurona presináptica y la postsináptica (la neurona que se encuentra después de la sinapsis), llamado espacio sináptico.
  • La presencia del neurotransmisor en el espacio sináptico provoca un cambio en la membrana de las dendritas de la neurona postsináptica. Como consecuencia de eso, el impulso nervioso se genera en esta neurona.
  • En la siguiente sinapsis, la que antes era la neurona postsináptica se convertirá en la neurona presináptica, ya que ésta se encuentra antes de la sinapsis y, además, se encargará de transmitir el impulso liberando neurotransmisores.

Impulso Nervioso

El impulso nervioso conducido de sinapsis en sinapsis a través de los axones y dendritas de las neuronas avanza aproximadamente a 60 centímetros por segundo. Esta velocidad es muy baja para nuestras necesidades. La mayoría de nuestros circuitos neuronales tienen un sistema que permite acelerar la transmisión del impulso nervioso mediante las vainas de mielina.

  • Las vainas de mielina son producidas por las células de Schwann, un tipo celular especial que rodea a los axones de muchas neuronas.
  • Las interrupciones entre dos segmentos de las vainas de mielina se llaman nódulos de Ranvier.
  • Los impulsos en las neuronas con vainas de mielina circulan más rápido gracias a que, en realidad, el impulso se regenera en cada nódulo de Ranvier. Esta transmisión recibe el nombre de saltatoria, porque el impulso «salta» de nódulo en nódulo y se difunde de forma pasiva en los espacios cubiertos con mielina.
  • En las neuronas sin mielina, el impulso se va debilitando con la distancia recorrida.
  • En las neuronas con mielina, el impulso se regenera y no pierde velocidad ni intensidad.

Organización del Sistema Nervioso

El sistema nervioso se divide básicamente en periférico y central.

Sistema Nervioso Central

El sistema nervioso central se organiza a lo largo de un tubo llamado espina dorsal o médula espinal, que recorre el cuerpo desde la cabeza hasta el origen de las extremidades inferiores.

  • La médula espinal está protegida por la columna vertebral y por tres membranas llamadas meninges (que protegen también el encéfalo). Desde la médula espinal salen los nervios que llegan a todos los órganos del cuerpo.
  • En la cabeza está el encéfalo, que es la estructura más importante del sistema nervioso central. El encéfalo está formado por miles de millones de neuronas conectadas entre ellas, y se encarga de las funciones más complejas de nuestro sistema nervioso. Está protegido por los huesos del cráneo y, de la misma manera que la médula espinal, por un conjunto de membranas llamadas meninges.
  • Las meninges se encargan de formar una zona de aislamiento entre el cerebro y el cráneo, con el fin de evitar el efecto de los golpes sobre el sistema nervioso central. Entre las dos meninges más internas se encuentra el líquido cefalorraquídeo, encargado de amortiguar los golpes.

El encéfalo consta de tres partes fundamentales:

  • Bulbo raquídeo: parte inferior del encéfalo, en contacto directo con la médula espinal.
  • Es la zona de paso para todos los impulsos que entran o salen de las zonas superiores hacia o desde la médula.
  • Además, el bulbo raquídeo controla de forma directa aspectos como el ritmo cardíaco, la respiración, el reflejo para tragar, nuestra presión sanguínea y otros aspectos básicos de funcionamiento que no requieren de un control voluntario.
  • Cerebelo: parte que integra la información concerniente al movimiento. Responsable de la coordinación motora y de la adquisición de patrones de movimiento complejos.
  • Cerebro: parte de mayor tamaño y con muchas más células y conexiones. Formado por un conjunto de estructuras con un área de funciones determinada. La parte más desarrollada en humanos es el neocórtex, una zona dividida en dos hemisferios y responsable de las funciones superiores características de la especie humana (como el pensamiento abstracto o el lenguaje).

Sistema Nervioso Periférico

Dentro del sistema nervioso periférico, se distingue el sistema nervioso somático (que ejecuta movimientos voluntarios) y el sistema nervioso vegetativo (que controla movimientos involuntarios). El sistema nervioso periférico está formado por los nervios sensitivos (que captan información sensorial) y los nervios motores (que llevan información a los efectores). Los nervios son fibras que parten del sistema nervioso central y lo conectan con el resto de partes del cuerpo a través de impulsos nerviosos. Los nervios están constituidos por diversas fibras nerviosas que a su vez están formadas por neuronas agrupadas.

Funcionamiento del Sistema Nervioso

El sistema nervioso funciona mediante circuitos entre neuronas. Estos circuitos se activarán según el tipo de actividad que se desarrolle, los tipos de neuronas y los tipos de circuitos. Una vez procesada la información (en mayor o menor grado) se producirá una respuesta visible (como una respuesta motora, por ejemplo) o invisible (como memorizar una nueva palabra).

Enfermedades y Alteraciones del Sistema Nervioso

Distinguimos enfermedades neurológicas (donde hay una lesión concreta de un elemento) y enfermedades psíquicas (donde hay un problema, pero que no es fruto de ninguna lesión concreta). Las más importantes son:

Enfermedades Psicológicas

  • Depresión: tristeza profunda que impide a la persona seguir adelante con su vida normal.
  • Esquizofrenia: dificultad patológica para percibir o expresarse respecto a la realidad de su alrededor. Sin tratamiento, el individuo sufre trastornos de personalidad.
  • Demencia: proceso que supone la pérdida de las funciones superiores propias del cerebro humano (esencialmente memoria, atención, lenguaje y resolución de problemas). En estadios avanzados se pierde la noción del tiempo, del espacio e incluso la propia identidad.

Enfermedades Neurológicas

  • Meningitis: inflamación, normalmente infecciosa, de las meninges (envoltura del sistema nervioso central).
  • Epilepsia: desorden neurológico crónico. Provoca ataques en los que tienen lugar impulsos eléctricos cerebrales de forma excesiva, anormal y sincronizada.
  • Esclerosis múltiple: enfermedad degenerativa causada por la pérdida progresiva de la vaina de mielina que cubre los axones de las neuronas. Según el tipo de neurona afectada, los problemas que se van presentando en la persona son diferentes: problemas motrices, de visión, de habla, etc.
  • Parkinson: enfermedad degenerativa provocada por la pérdida de las neuronas que producen dopamina en una determinada área del cerebro, encargada del control motor. Eso hace que la persona acostumbre a presentar trastornos motores, como temblores, lentitud en los movimientos o falta de equilibrio. En fases más avanzadas de la enfermedad, la persona puede tener dificultades para realizar actividades básicas, como por ejemplo andar, tragar, hablar o hacer tareas sencillas.
  • Alzheimer: tipo particular de demencia. Es una enfermedad grave que deteriora todas las funciones intelectuales (memoria, razonamiento) de forma progresiva. La causa que lo provoca es poco conocida, pero parecen estar demostrados los efectos preventivos de una vida intelectual activa.

Aparato Locomotor

El aparato locomotor tiene una doble función:

  • Mantiene la estructura del organismo ante el entorno.
  • Sirve para producir movimientos y desplazamientos.

Sistema Esquelético

El esqueleto es el sistema sostenedor básico del cuerpo. Sirve de protección contra golpes, ayuda a mantener la estructura del organismo y sirve como punto de anclaje a los músculos, que son los encargados de producir movimiento. El esqueleto está formado por un conjunto de piezas, la mayoría de ellas muy resistentes y bastante rígidas, que permiten el movimiento en algunas zonas gracias a la articulación de diferentes piezas.

Huesos

Las unidades que forman el esqueleto son los huesos. El cuerpo humano tiene 206 huesos, repartidos entre el esqueleto axial (el que forma el eje cabeza-columna vertebral) y el esqueleto apendicular (el de las extremidades y su articulación con el esqueleto axial). Más de la mitad de los huesos del cuerpo corresponden al esqueleto que forma los brazos y las piernas. En concreto, tenemos 30 huesos por cada brazo y mano, y otros 30 por cada pierna y pie. Eso hace un total de 120 huesos.

Composición de los Huesos
  • Los huesos están formados por células colocadas alrededor de los canales haversianos. Dentro de los canales haversianos circulan los vasos sanguíneos y los nervios propios del hueso.
  • Estas células situadas alrededor de los canales son las encargadas de producir la matriz extracelular, donde se depositan las sales minerales (fundamentalmente fosfato de calcio) que dan la rigidez al hueso.
  • La matriz contiene otros elementos, como proteínas, entre las que destacan (aproximadamente el 90% de la matriz) las fibras de colágeno, encargadas de aportar cierto grado de elasticidad al hueso y evitar así que se fracture con facilidad.
Tejido Óseo

La mayor parte de los huesos se estructuran en tres capas:

  • Tejido óseo compacto: se encuentra en la parte exterior; es donde se acumula la mayoría del fosfato de calcio y los otros minerales que dan al hueso su consistencia.
  • Tejido óseo esponjoso: sólo se encuentra en los huesos planos y en los extremos de los huesos largos. Su grado de mineralización es mucho más bajo. Esta mineralización inferior hace que su estructura esté llena de agujeros (de ahí su nombre).
  • Médula ósea: se encuentra sólo en la parte más interna de los huesos planos y de los huesos largos. Masa de tejido que se encarga de generar todas las células de la sangre (glóbulos rojos y blancos).
Clasificación de los Huesos

Según su forma, los huesos se clasifican en:

  • Huesos largos: los mayoritarios. Son los que recorren nuestras extremidades, tanto superiores como inferiores, exceptuando el carpo (en la mano) y el tarso (en el pie).
  • Huesos cortos: huesos muy específicos de ciertas articulaciones. A este grupo pertenecen el carpo y el tarso.
  • Huesos planos: destacan por su superficie. Son los huesos encargados de formar cavidades dentro del cuerpo. Un ejemplo son los huesos del cráneo, el esternón y las costillas.
  • Huesos irregulares: tienen formas muy condicionadas por la función que deben realizar. El mejor ejemplo son las vértebras, que protegen la médula espinal y sirven de anclaje a la musculatura. Las vértebras se tienen que articular entre ellas, permiten la flexibilidad y tienen que unirse con las extremidades.

Cartílago

El cartílago es un tipo de tejido más blando que el óseo. Su matriz es similar a la de un hueso, pero en este caso encontramos muchas más fibras de colágeno y casi no hay depósitos de minerales. Eso hace que el tejido cartilaginoso sea mucho más plástico y adaptable que el óseo.

Utilidades del Tejido Cartilaginoso
  • En los puntos de articulación sirven para disminuir el roce y permitir que la articulación sea más suave.
  • En las orejas y septo nasal sirven para dar más consistencia a estos apéndices.
  • En la tráquea y entre las costillas sirven para permitir flexibilidad y conservar la resistencia.
  • En el momento del nacimiento hay mucha más presencia de cartílago. Eso permite que el esqueleto del niño pueda crecer hasta alcanzar la talla adulta. Durante el proceso, las regiones de cartílago se van reemplazando por tejido óseo hasta que éste sólo queda reducido a las tres zonas anteriores y al extremo de los huesos largos (para permitir el crecimiento hasta la talla adulta).

Articulaciones

Las articulaciones son los lugares donde los huesos se unen entre sí y configuran un conjunto. Las articulaciones sólo son uniones entre huesos y pueden impedir cualquier tipo de movimiento. Según el grado de movimiento que permiten, hay tres tipos de articulación:

  • Articulación inmóvil: no significa que los huesos estén soldados, pero sí que se encuentran fuertemente unidos a través de tejido fibroso o cartilaginoso. Ejemplo: los huesos del cráneo.
  • Articulación semimóvil: la unión permite movimientos, pero muy limitados en el espacio. Ejemplo: las vértebras.
  • Articulación móvil: permite movimientos amplios y variados. Ejemplos: brazos, piernas, dedos, caderas, etc.

Sistema Muscular

Los músculos son estructuras fibrosas que tienen la capacidad de contraerse. Se encuentran en cualquier lugar del cuerpo donde se necesite producir movimiento. No todo el tejido muscular está vinculado al aparato locomotor. De los tres tipos de tejido muscular (liso, cardíaco y estriado), sólo el estriado está vinculado al aparato locomotor. El tejido liso (que está en las vísceras y provoca movimientos involuntarios) y el tejido cardíaco (que se encarga de los movimientos del corazón) no pertenecen al aparato locomotor.

Fibra Muscular

La unidad básica del tejido muscular es la fibra muscular.

  • Una fibra muscular es una sola célula, alargada y con muchos núcleos.
  • Cada fibra muscular está recorrida por muchas miofibrillas, que son largas cadenas de proteínas con capacidad de contraerse.
  • Las fibras musculares se empaquetan y forman haces (también llamados fascículos).
  • La unión de muchos fascículos es la que dará como resultado el músculo.

Nuestro cuerpo tiene unos 640 músculos estriados.

¿Cómo se consigue el movimiento?

Las miofibrillas que recorren el interior de cada fibra muscular están formadas por la repetición de una misma estructura, llamada sarcómero, que es una unidad de contracción formada básicamente por dos proteínas: actina y miosina. La miosina hace de motor y provoca el movimiento de las fibras de actina, con lo que se produce el acortamiento que da lugar a la contracción del músculo.

El movimiento se produce cuando llegan impulsos a través de los axones de las neuronas motoras que llegan a las fibras musculares y hacen una sinapsis con el tejido muscular. Para que el movimiento no se limite sólo al músculo y se traslade a todo el cuerpo, es necesario que estos músculos estén vinculados a los elementos de nuestro esqueleto. Existen dos tipos de vínculo entre músculos y elementos esqueléticos:

  • Ligamentos: grandes conjuntos de fibras de colágeno que unen los extremos de un músculo a huesos alargados del esqueleto.
  • Tendones: fijan los músculos al esqueleto. Cuando un músculo se contrae, reduce su tamaño. Como se encuentra unido a los huesos, esta contracción se traduce en un movimiento del esqueleto (con todos los elementos del cuerpo que haya alrededor).

Funciones del Tejido Muscular

El tejido muscular es necesario para los movimientos de locomoción, pero también tiene un papel importante en otras funciones, como por ejemplo:

  • Mantenimiento de la postura (musculatura de la espalda y abdominal)
  • Movimientos respiratorios (diafragma y músculos intercostales)
  • Musculatura con papel gestual
  • Musculatura para abrir y cerrar esfínteres

Forma de los Músculos

La forma de los músculos está vinculada a su función.

  • La mayoría de los músculos de las extremidades son fusiformes (con forma de huso).
  • Para recubrir superficies, encontramos músculos planos.
  • Existen músculos orbiculares, encargados de formar estructuras circulares, como la boca y los ojos.

Músculos Antagonistas

Para que el movimiento se ejecute de forma suave, los músculos trabajan por parejas.

  • Por cada músculo flexor existe un músculo extensor. Cuando uno de ellos se contrae, el otro se relaja.
  • Siempre habrá un control activo de la parte del cuerpo que se está moviendo.

La mayoría de los músculos tiene uno o un grupo de antagonistas. Los músculos antagonistas son aquellos que se encargan de movimientos opuestos.

Actividad Física

Todos tenemos el mismo número de músculos, pero su desarrollo será diferente en función, sobre todo, de la práctica de actividades físicas. La actividad física tiene muchas ventajas fisiológicas:

  • Aumenta la cantidad de fibras musculares, su resistencia, la flexibilidad de los tendones e incluso aumenta el número de mitocondrias de las fibras musculares.
  • Aumenta el tamaño y la fuerza de la musculatura del corazón y la capacidad pulmonar. Estos dos factores incrementan la eficiencia del bombeo de sangre hacia los músculos.
  • Fortalece las articulaciones, con lo que previene y retarda la aparición de problemas articulares (como la artrosis).

Desde el punto de vista del trabajo muscular, podemos distinguir dos tipos de actividad física:

  • Actividad aeróbica: es una actividad en la que los músculos implicados reciben la aportación de oxígeno que necesitan para funcionar. Este tipo de actividades se puede alargar durante bastante tiempo, siempre y cuando no existan problemas de disponibilidad de otros elementos (glucosa, agua, etc.).
  • Actividad anaeróbica: es una actividad que, por su intensidad, requiere más oxígeno para los músculos del que el sistema circulatorio puede aportar. En este caso, el músculo trabaja con déficit de oxígeno, pero sólo puede hacerlo durante un tiempo limitado.

Lesiones en el Aparato Locomotor

Las lesiones más frecuentes del aparato locomotor son:

  • Esguince: ruptura, daño o distensión de los ligamentos. Es bastante frecuente y requiere reposo y, a menudo, vendajes.
  • Rampa: se produce cuando una contracción se bloquea, no consigue relajarse. Es relativamente leve y se produce generalmente cuando una actividad se inicia sin calentamiento o se alarga demasiado tiempo.
  • Fractura: es la rotura del hueso. Se suele tratar con inmovilización pero, si es complicada, puede llegar a necesitar cirugía para asegurar la correcta posición del hueso para su soldadura.
  • Dislocación (o luxación): es la salida de un hueso de su rango normal de articulación. No hay ningún hueso roto, pero la articulación deja de funcionar. Para recuperar la funcionalidad de la articulación hay que volver a colocar el hueso en su posición correcta.

Sistema Endocrino

El sistema endocrino está formado por glándulas, que son estructuras especializadas en liberar sustancias con función reguladora. El sistema endocrino se encarga de:

  • Mantener la homeostasis
  • Controlar el crecimiento
  • Controlar el desarrollo sexual y el proceso de la reproducción
  • Controlar la respuesta fisiológica a situaciones como el sueño, el estrés, etc.

Los sistemas nervioso y endocrino operan de forma coordinada. El punto de conexión entre ambos se establece entre el hipotálamo (una región del encéfalo) y la hipófisis (una glándula endocrina situada en el centro de la regulación del resto). El resto de glándulas del sistema endocrino responderán a las órdenes que se han enviado desde el hipotálamo, directamente, o a través de otras glándulas que éste ha estimulado. Aunque las sustancias producidas por cada glándula se distribuyen por todo el organismo, éstas sólo son efectivas en los tejidos a los que van destinadas y que son sensibles a ellas; son los tejidos diana y son específicos para cada sustancia.

Las hormonas son las sustancias que las glándulas del sistema endocrino producen para regular diferentes aspectos. Cada glándula se encarga de producir y secretar una o más hormonas diferentes bajo el control de la hipófisis y, a través de la hipófisis, del hipotálamo.

Glándulas Endocrinas

Hipotálamo – Hipófisis – Páncreas – Glándulas Suprarrenales – Tiroides – Gónadas

Hipófisis

Una parte de la hipófisis (la adenohipófisis) secreta directamente diferentes hormonas:

  • Hormona del crecimiento (GH): actúa de forma general en todo el cuerpo y promueve el crecimiento de todo el organismo. Sus funciones más destacadas son las siguientes: estimular la reproducción de las células del cartílago a partir de las cuales crece el hueso, estimular la acumulación de calcio en los huesos, aumentar la síntesis de proteínas y reducir la recogida de glucosa en el hígado.
  • Hormona estimulante de la tiroides (TSH): actúa sobre la glándula tiroides.
  • Hormona estimulante de la corteza suprarrenal: actúa sobre las glándulas suprarrenales.
  • Prolactina: controla la concentración en sangre de hormonas sexuales y la disminuye en los dos sexos. En las mujeres, además, estimula las glándulas mamarias (de ahí su nombre).
  • Gonadotropinas (FSH y LH): estimulan la producción de las hormonas sexuales (testosterona en hombres, estrógenos en mujeres) así como la producción de espermatozoides y la maduración cíclica de los óvulos.

Por otra parte, una porción de la hipófisis, llamada neurohipófisis, acumula y libera hormonas que en realidad han sido producidas por el hipotálamo. Las hormonas liberadas por la neurohipófisis son:

  • Oxitocina: estimula la liberación de la leche, fruto del estímulo que provoca la succión del bebé sobre el pecho de la madre. La oxitocina es también responsable de las contracciones del útero durante el parto. La oxitocina actúa también a nivel cerebral y contribuye a reforzar los vínculos afectivos entre personas.
  • Hormona antidiurética (o vasopresina): regula los niveles de agua en el organismo y se libera cuando el cuerpo necesita conservar al máximo el agua del cuerpo.

Glándula Tiroides

La tiroides es una glándula con forma de mariposa que se encuentra en la base del cuello. Su función endocrina consiste en regular nuestro ritmo de consumo energético, la tasa de fabricación de proteínas y el grado de sensibilidad de nuestro cuerpo a la presencia de otras hormonas. La tiroides produce tiroxina, triiodotironina y calcitonina.

  • Todos los tejidos del organismo son diana de la tiroxina y la triiodotironina (todos responden a ella).
  • Los huesos son el tejido diana de la calcitonina. La calcitonina se encarga de mantener altos los niveles de calcio del hueso, a costa de mantener bajos los niveles en la sangre.

Glándulas Paratiroides

Las glándulas paratiroides están situadas junto a la tiroides. Se encargan de producir la hormona paratiroidea (PTH), encargada de mantener altos los niveles de calcio en sangre a costa de extraer el calcio de los huesos. Por lo tanto, la calcitonina y la hormona paratiroidea tienen efectos antagónicos y gracias a esta oposición se consigue mantener un equilibrio entre el calcio en sangre y el calcio en los huesos.

Glándulas Suprarrenales

Hay una glándula suprarrenal sobre cada riñón y cada una se divide en dos regiones: corteza y médula.

  • La médula suprarrenal produce adrenalina y noradrenalina, que se encargan de responder de forma inmediata al estrés, hecho que aumenta la frecuencia cardíaca y la presión arterial, y que orienta el riego sanguíneo a las áreas motoras (preparando las posibles reacciones de ataque o de huida).
  • La corteza suprarrenal produce aldosterona y glucocorticoides.
  • Los glucocorticoides son hormonas que nos adaptan a las situaciones de estrés a largo plazo y nos protegen de situaciones peligrosas como el estrés o la inflamación.
  • La aldosterona actúa en el riñón y regula el equilibrio de sales minerales durante el filtrado por parte de los riñones.

En situaciones de estrés, adrenalina y glucocorticoides actúan como antagonistas.

Gónadas

Cuando se recibe la señal de que el cuerpo ha llegado al grado de crecimiento y maduración adecuados, el hipotálamo libera una hormona, la gonadotropina, que tiene como tejido diana a la hipófisis.

• Cuando la gonadotropina del hipotálamo la estimula, la hipófisis produce dos hormonas, comunes a ambos sexos: la hormona estimulante de los folículos (FSH) y la hormona luteinizante (LH). • La FSH y la LH actúan sobre las gónadas femeninas (ovarios) y las masculinas (testículos) y las estimulan para que produzcan sus propias hormonas. – En el caso de las chicas se secretan estrógenos y progesterona, responsables de la aparición de los caracteres sexuales secundarios y del inicio de los ciclos menstruales. – En el caso de los chicos se secreta básicamente testosterona, que hace que aparezcan los caracteres sexuales secundarios, y también estimula la producción de espermatozoides. Páncreas Además de la función exocrina durante la digestión, el páncreas tiene también una función endocrina y produce dos hormonas que regulan los niveles de glucosa en la sangre: la insulina y el glucagón, con efectos opuestos. • La insulina se encarga de bajar los niveles de glucosa en la sangre, lo que estimula la captación de ésta para los tejidos y la acumulación de reservas en forma de glucógeno en el hígado. • El glucagón se encarga de aumentar los niveles de glucosa en sangre cuando éstos son demasiado bajos, con lo que estimula la movilización de estas reservas.BIOLOGÍA y GEOLOGÍA | FuncIón dE rELAcIón | Versión impresa Función de relación | 19 enfermedades y alteraciones del sistema endocrino Los trastornos más frecuentes que afectan al sistema endocrino son los siguientes: • Gigantismo/enanismo Son dos trastornos consecuencia de un exceso de hormona del crecimiento (GH) en el caso del gigantismo, o una falta de ella, en el caso del enanismo. En ambos casos, el síntoma más aparente es la talla del individuo. No obstante, las repercusiones no se limitan a ser muy alto o muy bajo, también encontramos problemas relacionados con la estructura de los huesos y el equilibrio en las proporciones del cuerpo. • Hipertiroidismo/hipotiroidismo El hipertiroidismo es el exceso de producción de hormonas tiroideas (tiroxina y triiodotironina), que provoca, en general, una inflamación de la tiroides (bocio) y trastornos en la presión de los ojos, que los hacen sobresalir de las órbitas. El hipotiroidismo es la falta de producción de las hormonas tiroideas. También puede provocar el bocio, así como otras alteraciones, como el cretinismo (atrofias de carácter físico y mental severas que son causadas por la falta congénita de hormona tiroidea). • diabetes mellitus La diabetes se debe a problemas para producir insulina. A causa de eso, en los momentos en que el nivel de glucosa en la sangre aumenta mucho (poco después de comer), el organismo del diabético no tiene la capacidad de hacer bajar estos niveles de glucosa y acumularlos en forma de reservas. Por esa razón, se puede llegar a niveles peligrosos de azúcar en sangre. Existen dos tipos de diabetes: • La de tipo I la mayoría de veces se debe a un proceso autoinmune (los linfocitos atacan a las células del páncreas encargadas de fabricar la insulina). Se suele manifestar en la juventud, y normalmente requiere que la persona que la sufre reciba dosis perió- dicas de insulina para compensar este déficit. • La de tipo II está provocada por una pérdida de la sensibilidad a la acción de la insulina, muchas veces unida a una baja producción de insulina. Se suele manifestar alred

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