Función y Estructura del Sistema Renal: Clave para el Equilibrio Hidrosalino

El Sistema Renal: Función, Estructura y su Importancia

El sistema renal es el principal sistema de excreción de agua, sales minerales, productos metabólicos y sustancias químicas extrañas que han ingresado al organismo. Al excretar agua y diversos solutos, el sistema renal se convierte en un sistema fisiológico clave en la regulación del equilibrio hidrosalino de nuestro cuerpo.

En los seres humanos, el sistema renal está formado por los riñones y las vías urinarias.

Los riñones son los órganos encargados de la formación de orina, medio a través del cual se elimina la mayor parte del agua y los productos de desecho. Las vías urinarias son los conductos que transportan la orina para su excreción. Están constituidas por:

  • Uréter: Conducto muscular que conecta el riñón con la vejiga. Mediante movimientos peristálticos impulsa la orina desde la pelvis renal hacia la vejiga.
  • Vejiga: Es un órgano muscular elástico en el cual se almacena la orina hasta el momento de su expulsión. Tiene la capacidad de retener un gran volumen de orina, aproximadamente unos 300 a 350 ml. La vejiga está regulada por dos esfínteres, uno de ellos impide la salida de la orina hasta que la vejiga esté llena y el otro permite que la orina descienda por la uretra para ser eliminada.
  • Uretra: Es un conducto que permite la micción o evacuación de la orina desde la vejiga hacia el exterior del cuerpo. La uretra femenina tiene una longitud menor que la masculina y desemboca en la vulva. La uretra masculina cruza la próstata y el pene, y luego desemboca en el exterior.

Estructura y Función del Riñón

En el ser humano, los riñones son dos órganos de color rojo oscuro y forma de haba, que se ubican en la parte posterior del abdomen, a ambos lados de la columna vertebral y por debajo de la cintura.

  • Cápsula renal: Membrana fibrosa de color blanquecino que recubre el riñón.
  • Corteza renal: Es la región más externa del riñón, de textura lisa y color rojizo. Se extiende desde la cápsula renal hasta las pirámides renales, incluyendo el espacio entre estas.
  • Médula renal: Es la región interna del riñón, de color marrón rojizo. Está dividida en 10 a 18 zonas llamadas pirámides renales o de Malpighi.
  • Pirámide renal: Estructura cónica cuya base está orientada hacia la corteza renal, mientras que su vértice o papila se orienta hacia el centro del riñón situándose dentro del cáliz renal.
  • Pelvis renal: Es la parte del riñón que se comunica con el uréter y donde se agrupan los cálices renales, que recogen la orina desde cada papila.

Estructura del Nefrón

El nefrón es la unidad estructural y funcional del riñón. Cada riñón está formado por millones de nefrones dentro de los cuales se lleva a cabo la formación de la orina, proceso que está en estrecha relación con la estructura anatómica del nefrón.

La función básica del nefrón consiste en depurar el plasma sanguíneo, eliminando sustancias que no son utilizables por el organismo y cuya acumulación podría resultar tóxica, como, por ejemplo: la urea, la creatinina, los sulfatos, los fenoles y algunos fármacos.

  • Corpúsculo renal: Formado por el glomérulo de Malpighi y la cápsula de Bowman.
  • El glomérulo: Es una red muy enrollada de capilares sanguíneos que derivan de una arteriola aferente y confluyen en una arteriola eferente. La pared de estos capilares presenta poros, lo cual los hace muy permeables al paso de diversas moléculas.
  • La cápsula de Bowman: Es una estructura de doble pared que rodea al glomérulo, y a partir de la cual nacen los túbulos renales.
  • Túbulos renales: Corresponden al túbulo contorneado proximal, el asa de Henle, el túbulo contorneado distal y el túbulo colector.

Reabsorción y Secreción Tubular

  • Reabsorción tubular: Es el proceso por el cual los solutos y el agua son removidos desde el fluido tubular y transportados en la sangre. Es llamado reabsorción (y NO absorción) porque estas sustancias han sido absorbidas ya una vez (particularmente en los intestinos). La reabsorción es un proceso de dos etapas que comienza con la extracción activa o pasiva de sustancias desde el fluido tubular hacia el intersticio renal (el tejido conectivo que rodea las nefronas), y luego el transporte de estas sustancias desde el intersticio hacia el torrente sanguíneo.
  • Secreción tubular: Es el proceso mediante el cual los desechos y sustancias en exceso que no fueron filtrados inicialmente hacia la Cápsula de Bowman son eliminadas de la sangre para su excreción. Estos desechos son excretados activamente dentro del túbulo contorneado distal. Por ejemplo: Iones de Potasio.

Orina

Es el líquido producido por las nefronas, tiene un aspecto transparente, se produce en un volumen aproximadamente de 1500ml al día, contiene de un 90 a un 95% de agua y de un 5 a 10% de sustancias tales como urea, ácido úrico y amonio, además de Na, K, Cl.

Sistema Renal y Ejercicio Físico

Con el ejercicio, los parámetros hemodinámicos sufren profundas modificaciones debido al aumento del gasto cardíaco en unas 5-6 veces respecto a su valor basal, en función de un mayor retorno venoso y del incremento de la frecuencia cardíaca. Por otra parte se produce un gran aumento del gasto cardíaco que se dirige al músculo, hasta un 85% más que en reposo, debido a la vasodilatación arteriolar que acontece durante el ejercicio. Estos beneficios se producen en detrimento de otros órganos, como el riñón, que ve muy disminuido el flujo plasmático. El flujo plasmático renal (FPR) y el flujo sanguíneo renal (FSR) disminuyen de forma proporcional a la intensidad del ejercicio.

Variaciones en el Volumen y Excreción de Agua y Electrolitos Durante la Actividad Física

El ejercicio moderado, como el caminar, aumenta el volumen de orina tal vez como resultado de una mayor excreción de solutos a la orina que retienen más agua en los túbulos que de otra forma se hubiesen reabsorbido (efecto osmótico). Por el contrario, el ejercicio intenso se asocia a una disminución del volumen de orina, durante el ejercicio intenso y prolongado hay aumento en las pérdidas de agua y electrolitos por la respiración y el sudor. Para controlar el equilibrio hídrico se ponen en marcha dos mecanismos:

  1. Aumento de la ingestión de agua mediante el estímulo de la sed, mediado en parte por el aumento de la angiotensina.
  2. Disminución de la diuresis por aumento de los niveles de la hormona antidiurética, estimulada en parte por la angiotensina.

Se ha descrito una buena correlación entre los niveles plasmáticos de la hormona antidiurética y la intensidad de ejercicio, tal vez porque cuando la intensidad del ejercicio es importante se produce una disminución del catabolismo hepático de dicha hormona. El efecto antidiurético del ejercicio contribuiría a preservar al organismo del exceso de pérdida de agua.

El ejercicio origina cambios en la hemodinámica renal causando:

  • Disminución en el flujo sanguíneo renal (FSR)
  • Disminución en la filtración glomerular (FG)

Aumento de la fracción de filtración (FF) que intenta preservar la transferencia de metabolismo y sustancias a través de los glomérulos renales.

Flujo Sanguíneo Renal (FSR)
  • En reposo cerca del 90% de la sangre que llega al riñón pasa por el glomérulo, siendo el 20% de este débito total filtrado.
  • El FPR es de unos 660ml/min, sólo son filtrados unos 125ml/min.
  • A la relación existente entre el plasma que entra al riñón y el que es filtrado en los glomérulos, se le denomina FF. En condiciones normales, la FF es de un 20%.
Volumen y Excreción de Agua y Electrolitos en el Ejercicio Físico
  • El ejercicio moderado aumenta el volumen de orina por mayor excreción de solutos que retienen más agua en los túbulos.
  • El ejercicio intenso y prolongado disminuye la excreción de orina (volumen y electrolitos), debido a mayor pérdida de agua y electrolitos por la respiración y el sudor.

Para controlar el equilibrio Hídrico:

  • Estímulo de la sed (mediado por Angiotensina II) para aumentar ingesta de agua.

Importancia de la Hidratación en el Ejercicio

El agua es fundamental para el organismo, ayuda a transportar oxígeno, nutrientes, hormonas, entre otros, para cumplir con los requerimientos de los músculos al realizar ejercicio físico.

Además, es el componente principal de la sangre, regula la fluidez de esta, por lo que al no contar con los niveles adecuados de agua el organismo no moviliza rápidamente lo que necesita y se produce fatiga más rápido y, por lo tanto, una disminución del rendimiento deportivo.

El sistema renal es fundamental ya que en el proceso de formación de la orina actúa reteniendo agua y electrolitos necesarios para el organismo durante la realización de ejercicio físico.

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