Concepto de Hemostasia
La hemostasia es el conjunto de mecanismos fisiológicos que el organismo pone en funcionamiento para mantener la integridad vascular, prevenir y reparar roturas y obstrucciones de los vasos sanguíneos, y evitar las consecuencias de una hemorragia, ya sea espontánea o por traumatismos, a la vez que se mantiene la fluidez de la sangre circulante.
Coagulación
La coagulación es un proceso que necesita de la participación de diversos factores que, tras ser activados, tienen una función final: la transformación del fibrinógeno (proteína soluble) en fibrina (proteína insoluble).
Mecanismos de Coagulación
Cuando la lesión vascular es grande, además del tapón de plaquetas, es necesario que la sangre se coagule para consolidar el trombo plaquetario en la formación del coágulo de fibrina y así evitar la hemorragia. La coagulación sanguínea es la fase de la hemostasia en la que el trombo plaquetario provisional se transforma en trombo definitivo.
El resultado final es una gelificación de la sangre gracias a la transformación de una proteína plasmática soluble, el fibrinógeno, en otra insoluble, la fibrina. Esta última constituye la base del coágulo. Finalizada la coagulación, el coágulo se retrae englobando elementos formes de la sangre y exudando cierta cantidad de suero (retracción del coágulo). La trombina procede de la protrombina activada, y la activación de esta última puede conseguirse por dos mecanismos.
Aunque la coagulación es un proceso global, para facilitar su estudio se distinguen varias etapas: Vía intrínseca, extrínseca, vía de trombinoformación y fase de fibrinoformación. Inicialmente, la fibrina es soluble y se hace insoluble gracias al factor XIIIa.
Etapas de la Hemostasia
El proceso hemostático, que parece reservado al momento de solucionar una hemorragia producida por un traumatismo, es un proceso casi constante, pues debido a pequeños traumatismos de variada índole se producen muy frecuentemente. Se distinguen:
- Hemostasia primaria: La que ocurre en primer lugar, desarrollada por la pared vascular y las plaquetas, y que conduce a la formación de un trombo provisional.
- Hemostasia secundaria: Se refiere al proceso de coagulación plasmática que endurece el trombo provisional y lo hace definitivo (trombo definitivo).
Las fases que suceden para inhibir la hemorragia son:
- El primer paso es un fenómeno de origen vascular, produciéndose una contracción refleja del vaso, un estímulo que contrae el vaso y enlentece la circulación.
- En una segunda fase intervienen las plaquetas activadas por el colágeno que aparece en la lesión debido a la rotura vascular. Asimismo, hay una liberación de sustancias plaquetarias que va a favorecer la hemostasia:
- Tromboxano A2 y ADP: Favorece la agregación plaquetaria.
- Factor plaquetario III: Activa la trombina intrínseca, principio de la vía intrínseca de la coagulación.
- Serotonina y catecolaminas: Favorecen la contracción vascular prolongada.
- En este momento ya se ha constituido el llamado trombo primario que puede impedir la hemorragia, pero no es suficiente.
- Coagulación plasmática: Es necesario reforzar el trombo producido realizándose en un tiempo posterior el fenómeno de la “coagulación sanguínea”. La sangre, debido a estímulos que se producen en el punto de la lesión, va a coagular. Es un proceso complejo donde intervienen muchos factores. Algunos de estos son:
- Factor I o fibrinógeno
- Factor V o proacelerina (factor lábil)
- Factor VIII o factor antihemofílico
- Fibrinólisis: Disolución del coágulo de fibrina mediada por la plasmina y dando lugar a los productos de degradación de la fibrina.
- El vaso recupera su anterior forma y función (se repara).
Estos mecanismos dependen de cuatro factores: Pared vascular, Función plaquetaria, Coagulación sanguínea y Fibrinólisis.
Factores de la Coagulación
Son factores plasmáticos activadores de la coagulación o factores procoagulantes que circulan de forma inactiva en el plasma. Conjunto de glicoproteínas que, tras ser activadas, se convierten en enzimas que conducen a la transformación del fibrinógeno en fibrina y con ello la formación del coágulo. La característica es su capacidad para romper enlaces en los que el aminoácido presente es la serina.
Los factores de la coagulación se clasifican funcionalmente en tres grupos:
- Factores dependientes de vitamina K (II, VII, IX y X): Se sintetizan en el hígado y son dependientes de vitamina K porque poseen un aminoácido que sirve para fijar el Ca2+. Si no hay vitamina K, el aminoácido es sustituido por glutamato.
- Factores sensibles a la trombina (I, V, VIII y XIII): Todos estos factores son activados directamente por la trombina. Normalmente no se encuentran en el suero, excepto el factor XIII que se haya a baja concentración.
- Factores de contacto (XI, XII, precalicreina y quinógeno de alto peso molecular): Intervienen en el desencadenamiento de la coagulación al contactar con superficies con carga negativa y se encuentran normalmente en el suero.