Leyes de Mendel
Primera ley: Establece que al cruzar dos individuos de raza pura (homocigotos) para un carácter específico, todos los híbridos de la primera generación (F1) serán iguales. Estos individuos F1 son heterocigotos o híbridos, portando alelos de ambas razas puras: uno dominante, que se manifiesta, y uno recesivo, que no se expresa.
Segunda ley: Al cruzar entre sí las plantas de la primera generación (F1), Mendel observó que en la segunda generación (F2) reaparecían los fenotipos de las razas puras en una proporción específica. Esto demuestra que, aunque el alelo recesivo no se manifieste en la F1, se mantiene presente y puede expresarse en generaciones posteriores.
Tercera ley: Mendel cruzó plantas de guisantes homocigotas para dos caracteres (color y forma de la semilla). La primera generación (F1) mostró el fenotipo dominante para ambos caracteres. Al cruzar entre sí los individuos de la F1, observó que los alelos de diferentes genes se transmiten de forma independiente, generando nuevas combinaciones de fenotipos en la segunda generación (F2), incluyendo combinaciones no presentes en las generaciones parentales.
Muerte Celular
La muerte celular es un proceso fisiológico y patológico esencial para la homeostasis de los tejidos. Puede ocurrir por dos mecanismos principales: necrosis y apoptosis.
A) Necrosis
La necrosis es un proceso pasivo que ocurre en condiciones extremas no fisiológicas. Se desencadena por un desequilibrio osmótico que altera la permeabilidad de la membrana plasmática, causando entrada de agua y aumento del volumen celular. La cromatina nuclear se agrega, el retículo endoplasmático y las mitocondrias se dilatan, los ribosomas se desorganizan y los lisosomas se rompen. Finalmente, los orgánulos estallan, la membrana plasmática y la envoltura nuclear se desintegran, liberando el contenido celular al exterior y provocando una respuesta inflamatoria.
B) Apoptosis
La apoptosis, también conocida como muerte celular programada, es un proceso activo de suicidio celular. Implica el encogimiento y condensación de la célula, el colapso del citoesqueleto, la fragmentación del ADN y la alteración de la superficie celular, lo que facilita la fagocitosis de la célula moribunda sin liberar su contenido al exterior. La apoptosis es crucial en el desarrollo embrionario, la reabsorción de estructuras y la renovación de tejidos.
A diferencia de la necrosis, la apoptosis requiere la participación activa de la célula y se desencadena por señales específicas del entorno, que activan una cascada de señalización que culmina en la expresión de un programa genético de muerte celular. La apoptosis es un proceso regulado y esencial para el correcto funcionamiento del organismo, mientras que la necrosis es un proceso descontrolado y perjudicial.
La principal diferencia entre apoptosis y muerte celular es que en esta última las células están programadas para morir desde un principio (cola de anfibio) mientras que en la apoptosis la célula responde a estímulos locales específicos de un momento determinado.