Micosis Subcutáneas
Las micosis subcutáneas son infecciones fúngicas que afectan la piel y el tejido subcutáneo. En El Salvador, la esporotricosis y el micetoma son las más frecuentes.
Esporotricosis
El periodo de incubación oscila entre 3 días y 3 semanas. Se clasifica en:
- Linfática (82%): Se produce por la inoculación directa de Sporothrix schenckii en la piel, generalmente por astillas, espinas u otros vegetales. La lesión inicial es una pápula eritematosa o violácea que se ulcera y forma una costra. Posteriormente, aparecen nódulos secundarios a lo largo de los vasos linfáticos.
- Localizada (11%): Se presenta como una placa verrucosa, áspera y costrosa.
- Hematógena (7%): Es rara y se caracteriza por múltiples nódulos eritemato-violáceos.
Diagnóstico: Esporotricina (antígeno), examen directo y frotis, biopsia, cultivo, inmunofluorescencia.
Tratamiento: Yoduro de potasio o sodio en dosis crecientes (10 gotas después de cada comida, hasta 30 gotas 3 veces al día).
Micetoma
Es un tumor producido por hongos, clasificado en actinomicético (causado por actinomicetos) y eumicético (causado por hongos verdaderos). En México y Centroamérica, la mayoría de los casos son causados por Nocardia brasiliensis (86%).
Se presenta como una tumefacción con múltiples senos que drenan secreción purulenta. Afecta principalmente el pie (pie de Madura), pero también puede presentarse en rodilla, codo, espalda y abdomen. En El Salvador, el 73% de los casos se localiza en miembros inferiores, de los cuales el 44% en el pie.
Diagnóstico: Examen directo, cultivo, biopsia.
Tratamiento: Quirúrgico y médico. Diaminodifenil sulfona (200 mg/día hasta mejoría, luego 100 mg y 50 mg de forma indefinida).
Cromoblastomicosis
También conocida como dermatitis verrucosa cromoparasitaria o enfermedad de Pedro y Gómez. Es causada por varias especies de hongos, siendo Fonsecaea pedrosoi la más común en El Salvador.
La lesión inicial es una pequeña elevación escamosa y eritematosa que evoluciona a una placa verrucosa. El crecimiento es lento, pudiendo tardar más de 20 años en consultarse. La enfermedad suele ser asimétrica y unilateral.
Diagnóstico: Cultivo, examen directo, biopsia.
Tratamiento: Cirugía excisional para lesiones pequeñas. También se puede combinar anfotericina B con 5-FC.