Control de la secreción hormonal
El cuerpo humano utiliza dos mecanismos principales para controlar la secreción hormonal:
Control nervioso
El sistema nervioso capta los estímulos y provoca que las glándulas correspondientes liberen hormonas como respuesta.
Control endocrino
El sistema endocrino se basa en un mecanismo de control por retroalimentación, en el cual la secreción hormonal regula sus propios niveles. Puede ser:
- Negativa: Un nivel bajo de estímulo induce una mayor secreción hormonal.
- Positiva: Un nivel alto de estímulo induce una menor secreción hormonal.
Tipos de secreción hormonal
Secreción paracrina
La secreción paracrina ocurre cerca de las células diana, permitiendo que las hormonas secretadas lleguen rápidamente a ellas.
Secreción autocrina
La secreción autocrina se produce cuando una célula libera una hormona que actúa sobre sus propios receptores.
Relación entre el sistema nervioso y el sistema endocrino
El sistema nervioso (SN) y el sistema endocrino (SE) cumplen funciones complementarias. El SN puede regular la secreción de algunas sustancias endocrinas.
Características del sistema nervioso
- La acción nerviosa es rápida, tanto en su inicio como en su finalización.
- El sistema nervioso transmite los impulsos a través de un tejido especializado: los nervios.
Características del sistema endocrino
- La acción hormonal tiende a ser sostenida a largo plazo.
- El sistema endocrino utiliza la sangre para distribuir las hormonas.
Hipotálamo: Integración neuroendocrina
El hipotálamo es una estructura nerviosa cerebral que funciona como centro integrador de funciones hormonales. Se encuentra debajo del tálamo y coordina una serie de funciones corporales, como el control del apetito, la ansiedad y el comportamiento sexual.
Funciones endocrinas del hipotálamo
- Produce hormonas que viajan por la sangre hasta la hipófisis anterior.
- Produce la hormona oxitocina y la hormona antidiurética o vasopresina, que se almacenan en la hipófisis posterior y luego son liberadas a la sangre.
Hipófisis: La glándula maestra
La hipófisis es una pequeña glándula endocrina, de 1 cm de diámetro y 0.8 g de peso, que se aloja en el sistema nervioso central, en la base del cráneo, en una depresión del hueso esfenoides conocida como la silla turca. Está formada por tres lóbulos que, en conjunto, secretan al menos 10 hormonas diferentes.
Hipófisis anterior (adenohipófisis)
Formada por tejido glandular, secreta:
- Prolactina: Estimula el desarrollo de las glándulas mamarias y la producción de leche durante la lactancia.
- Hormona del crecimiento: Promueve el crecimiento de huesos y cartílagos.
- Hormonas tróficas: Actúan sobre otras glándulas, estimulando la producción de sus hormonas. Estas incluyen:
- Hormona estimulante de la tiroides (TSH): Regula la producción y secreción de hormonas tiroideas.
- Hormona adrenocorticotrópica (ACTH): Estimula la secreción de hormonas de la corteza suprarrenal.
- Hormona estimulante del folículo (FSH) y hormona luteinizante (LH): Esenciales para la producción de hormonas sexuales y la maduración de gametos.
- Somatotropina: Su hipersecreción puede causar gigantismo.
Hipófisis posterior (neurohipófisis)
Formada por tejido nervioso, no produce hormonas, sino que almacena y libera neurohormonas producidas por el hipotálamo:
- Oxitocina: Induce las contracciones uterinas durante el parto y estimula la eyección de leche en las glándulas mamarias.
- Hormona antidiurética (ADH) o vasopresina: Incrementa la reabsorción de agua en los riñones, controlando el metabolismo hídrico.
Hipófisis intermedia
Formada por tejido glandular, se encuentra entre la hipófisis anterior y posterior. Produce melanocitos, que dan pigmentación a la piel.
Trastornos de la secreción hormonal
- Hipersecreción: Exceso de secreción hormonal.
- Hiposecreción: Déficit de secreción hormonal.
Glándulas endocrinas y sus funciones
Tiroides
Ubicada en el cuello, produce tiroxina, que regula el metabolismo celular. La hipersecreción puede causar pérdida de peso, mientras que la hiposecreción puede causar aumento de peso y, en casos extremos, gigantismo o enanismo.
Paratiroides
Cuatro pequeñas glándulas situadas sobre la tiroides. Producen paratohormona, que regula la concentración de calcio en la sangre, y calcitonina. La hipersecreción puede causar debilidad ósea y muscular, mientras que la hiposecreción puede llevar a osteoporosis. La regulación del calcio implica la interacción entre el tubo digestivo, los huesos y los riñones.
Timo
Situado en el centro del pecho, promueve el desarrollo de los linfocitos T.
Páncreas
Situado detrás del estómago, produce jugo pancreático para la digestión, insulina (producida por las células Beta) y glucagón (producido por las células Alfa), que controlan la concentración de glucosa en la sangre. La hipersecreción de glucagón puede causar hipoglucemia (mareos por falta de azúcar), mientras que la hiposecreción de insulina puede causar hiperglucemia (exceso de azúcar).
Glándulas suprarrenales
Situadas sobre los riñones, segregan hormonas que regulan el metabolismo de lípidos y proteínas, así como adrenalina, que controla nuestra reacción en situaciones de peligro y es conocida como la hormona de las emociones.
Ovarios
Glándulas sexuales femeninas ubicadas en la región pélvica. Producen estrógenos y progesterona, que regulan el desarrollo de los caracteres sexuales secundarios femeninos y la liberación de óvulos. La hipersecreción de estas hormonas acelera el desarrollo sexual, mientras que la hiposecreción puede causar infertilidad.
Testículos
Glándulas sexuales masculinas ubicadas en la parte inferior del abdomen. Producen testosterona, que regula el desarrollo de los caracteres sexuales secundarios masculinos y la producción de espermatozoides. La hipersecreción acelera el desarrollo sexual, mientras que la hiposecreción puede causar infertilidad.