Neurohipófisis: Secreción de Oxitocina y Vasopresina
La neurohipófisis almacena la oxitocina y la vasopresina en gránulos de secreción de los terminales axónicos. En el terminal axónico, las dos hormonas se localizan en el interior de gránulos de secreción unidas a unas proteínas llamadas neurofisinas. Hay dos tipos diferentes, y cada hormona se une a uno de ellos:
- La oxitocina se une con la neurofisina I, también conocida como neurofisina dependiente de estrógenos, porque estos estimulan su síntesis.
- La vasopresina se une con la neurofisina II, también llamada neurofisina nicotina-dependiente.
Algunas vesículas de secreción se localizan más cerca de los capilares (serán las primeras en liberarse), pero otras se localizan en unas dilataciones del axón denominadas cuerpos de Herring (serán liberadas más tarde). El transporte de los gránulos de secreción a lo largo del axón dura aproximadamente 2 horas, y es un proceso que se ve facilitado por las neurofisinas. La secreción de los gránulos se produce principalmente debido a estímulos nerviosos que no se realizan sobre la neurohipófisis, sino en los somas de las neuronas magnocelulares (NSO y NPV). Se genera un potencial de acción en el soma neuronal que es transmitido a lo largo del axón hasta llegar a la zona del terminal axónico, donde produce una despolarización de la membrana. Esto provoca la liberación de los gránulos por mecanismos de exocitosis. Al mismo tiempo se estimula la síntesis de más cantidad de hormona en los cuerpos neuronales.
Una vez que el gránulo se ha liberado, la hormona se separa de la neurofisina, por lo que la mayor parte circula libre en sangre. Sin embargo, una pequeña porción de la vasopresina circula unida a plaquetas. Ambas hormonas se metabolizan en el hígado, tras lo cual se dirigen a sus respectivos órganos diana (riñón para vasopresina y útero + glándula mamaria para oxitocina).
Hormona Antidiurética (ADH) o Vasopresina
La hormona antidiurética, o ADH, actúa sobre numerosos órganos y tejidos del organismo. Tiene dos tipos de receptores, ambos de membrana (porque ya hemos dicho que es una hormona peptídica):
- Receptores V1: median todas las acciones que realiza la ADH fuera del riñón, es decir, son los receptores extrarrenales. Son receptores acoplados a proteínas Gq, ya que provocan cascadas de señalización intracelular que conllevan a un aumento de la concentración de calcio en el interior de las células.
- Receptores V2: median las acciones renales de la ADH. Son receptores acoplados a proteínas Gs, ya que ocasionan un aumento del cAMP en el interior de la célula al ser activados.
La acción más importante de la ADH es la estimulación de la reabsorción de agua en el riñón, en los túbulos distales y los conductos colectores. Como esto ya se estudió con detalle en la fisiología renal, no se va a hacer mayor hincapié, así que nos centraremos más en el resto de acciones de la ADH que aún no conocemos. Otra acción importante de la ADH se realiza sobre el sistema cardiovascular, produciendo una vasoconstricción de las arteriolas para contribuir a la redistribución local del flujo sanguíneo cuando hay caídas de volumen y de presión arterial. No todos los lechos capilares son igual de sensibles a la acción de la ADH, ya que la densidad de receptores es distinta: los más sensibles son los del músculo esquelético y el tracto digestivo. La ADH también actúa en el hígado estimulando la glucogenólisis y el paso de glucosa hacia la sangre. Por ello la hipoglucemia es un estímulo que promueve la liberación de ADH. Asimismo, la ADH actúa en la adenohipófisis, comportándose como la CRH: estimula la secreción hipofisaria de ACTH. Aún así, es menos potente que la CRH. Por último, a nivel central la ADH tiene dos acciones más. Por un lado, disminuye la temperatura corporal en caso de tener fiebre, es decir, tiene acción antipirética. Esto se debe a que durante la fiebre se libera interleucina 1, que estimula la síntesis y secreción de ADH. Por otro lado, favorece la recuperación de la memoria en sujetos que tienen amnesia provocada por un traumatismo.
Factores que Controlan la Secreción de ADH
En cuanto a los factores que controlan la secreción de la hormona antidiurética, encontramos:
- Estimulantes:
- Aumento de la osmolaridad del LEC.
- Disminución del volumen del LEC.
- Aumento de la temperatura corporal.
- Angiotensina II.
- Inhibidores:
- Disminución de la osmolaridad del LEC.
- Aumento del volumen del LEC.
- PNA (péptido natriurético atrial).
- Disminución de la temperatura corporal.
- Fármacos antihipertensivos, como la clonidina. Son agonistas α2.
Oxitocina
Los órganos diana más importantes de esta hormona son la glándula mamaria y el útero. Todas sus acciones son mediadas por un único tipo de receptor de membrana, muy similar al receptor V1 de la ADH.
Acciones de la Oxitocina en la Lactancia
Durante la lactancia, la oxitocina provoca las contracciones de las células mioepiteliales de los alvéolos mamarios, así como de las células de músculo liso de las paredes de los conductos galactóforos. Por lo tanto, favorece la secreción y el transporte de la leche, así como su expulsión a través del pezón. El número de receptores para oxitocina en la glándula mamaria aumenta justo después del parto, y disminuye tras el destete. Debido a que la secreción de la oxitocina se produce de manera pulsátil, la excreción de la leche se produce de forma intermitente, y en ambas mamas a la vez. Cuando aumentan los niveles de adrenalina en una mujer que está dando el pecho, se inhibe la acción de la oxitocina en la glándula mamaria porque la adrenalina es un vasoconstrictor, así que disminuye la cantidad de oxitocina que llega, y porque la adrenalina es un antagonista de la oxitocina (se une a sus receptores y bloquea su acción).
Secreción de Oxitocina
La secreción de oxitocina durante la lactancia se produce por un reflejo iniciado por el contacto/succión del pezón. Se estimulan entonces unos mecanorreceptores que envían la información a la médula espinal. De ahí asciende al hipotálamo y estimula a las neuronas magnocelulares. En respuesta a este estímulo se liberan oxitocina y prolactina. Además, cuando la mujer se está preparando para amamantar (una vez que ha nacido el niño), se produce oxitocina y prolactina por los estímulos olorosos y sonoros del bebé.
Acciones de la Oxitocina en el Útero
En cuanto a sus acciones en el útero, la oxitocina participa en la fase de expulsión del parto. Cuando se dilata el cérvix por la presencia del bebé, se estimulan mecanorreceptores del cuello uterino, que mandan la información hasta el hipotálamo a través de la médula espinal. Esa información estimula la síntesis y secreción de oxitocina. La acción que ejerce a nivel del útero es aumentar la frecuencia e intensidad de las contracciones del músculo liso uterino. Además, estimula la liberación de prostaglandina F2α (un potente vasodilatador) por parte del útero, lo cual contribuye a aumentar las contracciones del músculo liso (al vasodilatar llega más oxitocina a la zona). La acción de la oxitocina en el útero es dependiente de los niveles circulantes de estrógenos y progesterona, más específicamente de la relación estrógenos/progesterona. Los estrógenos aumentan el número de receptores para oxitocina en el útero, y la progesterona lo disminuye. Por ello, antes del parto aumenta el cociente estrógenos/progesterona. Tras el parto, la oxitocina contribuye en el alumbramiento, es decir, en la expulsión de la placenta.
Tiroxina y Triyodotironina: Hormonas Tiroideas
La glándula tiroides tiene una característica especial en la síntesis de sus dos hormonas más importantes: necesita la incorporación de un elemento exógeno, el yodo, obtenido con la dieta. Sin él, la síntesis de dichas hormonas sería imposible, ya que se trata de hormonas yodadas.
Proceso de Formación de las Hormonas Tiroideas
El proceso de formación de estas hormonas se realiza mediante una serie de pasos que pueden resumirse en:
- Captación y concentración del yoduro procedente de la sangre.
- Síntesis y secreción al coloide de la tiroglobulina.
- Transporte del yoduro hacia el coloide y oxidación.
- Yodación de la tiroglobulina en el coloide.
- Formación de la tiroglobulina madura.
- Resorción del coloide.
- Liberación de T3 y T4 hacia la sangre.
Estructura de la Glándula Tiroides
La glándula tiroides está compuesta por numerosos folículos cerrados, rellenos de una sustancia proteínica denominada coloide y rodeados por una sola capa de células epiteliales secretoras. La primera fase de la formación de las hormonas tiroideas es el transporte del yodo desde la sangre al interior de dichos folículos. A nivel del dominio basolateral de los tirocitos existe una bomba de yoduro denominada “trampa de yoduro”, capaz de captar dicho ion desde la sangre e introducirlo en los tirocitos en contra de gradiente. Este transportador actúa por medio de un cotransporte activo secundario con sodio, aprovechando el gradiente de concentración de este último producido por las bombas Na+/K+. La trampa de yoduro no es específica, sino que es capaz de transportar también perclorato y tiocinato, competidores directos del yodo para entrar en el tirocito. Además, el inhibidor ouabaína permite bloquear dicho transportador.