1. El Aparato Circulatorio
1.1 Función
El aparato circulatorio transporta la sangre por todo el cuerpo humano, llevando nutrientes y hormonas a las células y expulsando los desechos.
1.2 La Sangre
La sangre es un líquido que circula por los vasos sanguíneos. Lleva a las células los nutrientes y el oxígeno, y recoge el dióxido de carbono y otros desechos (productos de las reacciones químicas celulares) que deben ser expulsados del cuerpo. Está formada por:
- Plasma: Líquido amarillento que transporta nutrientes, hormonas, enzimas y productos de desecho de las células.
- Células sanguíneas: Se forman en la médula ósea.
- Glóbulos rojos: Son las células más abundantes. Contienen hemoglobina (proteína compleja que contiene hierro). La hemoglobina se une al oxígeno en los pulmones y lo transporta, a través de la corriente sanguínea, hasta los capilares, donde se libera y llega a todas las células.
- Glóbulos blancos o leucocitos: Nos defienden de los agentes infecciosos como bacterias y virus que penetran por la piel o por los orificios naturales del cuerpo. Los más importantes son:
- Neutrófilos y monocitos: Destruyen los gérmenes invasores.
- Linfocitos: Fabrican anticuerpos para impedir la propagación de los microorganismos. También intervienen en la eliminación de las células alteradas o cancerosas.
- Plaquetas o trombocitos: Son fragmentos de citoplasma que proceden de células de la médula ósea roja. Intervienen en la coagulación de la sangre.
1.3 El Corazón y la Circulación
El corazón es un órgano hueco, ligeramente cónico, situado en la cavidad torácica, entre los pulmones.
- Pericardio: Membrana que envuelve el corazón.
- Miocardio: Las paredes del corazón están formadas por músculo cardíaco, que permite que el corazón se contraiga (sístole) y se relaje (diástole) rítmicamente.
El corazón está dividido en dos partes: una aurícula y un ventrículo, separadas por un tabique longitudinal. Cada aurícula se comunica con su correspondiente ventrículo. Las válvulas mitral y tricúspide permiten el paso de la sangre de las aurículas a sus respectivos ventrículos, e impiden el movimiento en sentido contrario. En el inicio de la arteria pulmonar y de la aorta se encuentran las válvulas semilunares, que impiden el retroceso de la sangre a los ventrículos.
- Diástole ventricular: Durante esta fase, la sangre venosa llena las aurículas y los ventrículos de manera pasiva. Las válvulas mitral y tricúspide se encuentran abiertas, y las válvulas pulmonar y aórtica están cerradas.
- Sístole auricular: Envía sangre adicional a los ventrículos. Después de ella, se cierran las válvulas mitral y tricúspide.
- Sístole ventricular: Provoca la apertura de las válvulas aórtica y pulmonar e impulsa la sangre hacia las arterias. Los ventrículos se relajan, se cierran las válvulas aórtica y pulmonar, se abren la mitral y la tricúspide, y la sangre entra a las aurículas y a los ventrículos. Este es el inicio de un nuevo ciclo cardíaco.
La sangre impulsada por el corazón en cada sístole circula por las arterias, los capilares y las venas. La elasticidad de las arterias aorta y pulmonar permite que el flujo discontinuo producido por el corazón se transforme en un flujo continuo. Las arterias constituyen las vías de salida desde los ventrículos, mientras que las venas son las vías de entrada a las aurículas. La circulación es doble, pues la sangre se desplaza por todo el cuerpo a través de dos circuitos conectados en serie: el circuito pulmonar y el circuito sistémico.
- Circulación mayor o sistémica: Se efectúa entre el corazón y el resto del cuerpo. Transporta el oxígeno y los nutrientes a todos los tejidos y retira los desechos producidos por las células. Se inicia con la contracción del ventrículo izquierdo, que impulsa la sangre oxigenada, procedente de la circulación pulmonar, a la arteria aorta. Su pared es más gruesa que la del ventrículo derecho, ya que tiene que vencer mayor resistencia. La sangre se distribuye por los distintos órganos, donde se efectúa el intercambio capilar. Los capilares confluyen en las venas, que llevan la sangre de retorno al corazón. La sangre desoxigenada y cargada de dióxido de carbono ingresa por las venas cavas en la aurícula derecha.
- Circulación menor o pulmonar: Se establece entre el corazón y los pulmones. Su función es efectuar el intercambio de los gases respiratorios (oxígeno y dióxido de carbono). Comienza con la contracción del ventrículo derecho, que envía sangre venosa a la arteria pulmonar. La arteria se divide en dos ramas, que penetran en los pulmones y se ramifican para formar capilares, a través de los cuales se efectúa el intercambio de gases. La sangre oxigenada regresa por las venas pulmonares hasta la aurícula izquierda.
1.4 Enfermedades del Aparato Circulatorio
- Hipertensión arterial: Aumento de la presión que ejerce la sangre sobre la pared de las arterias. Si se mantiene durante mucho tiempo, produce una sobrecarga del corazón y de los vasos sanguíneos, provoca el deterioro de los riñones y favorece la arteriosclerosis. Para evitarla: llevar una vida más relajada, suprimir el tabaco y el café, una alimentación equilibrada (sin sal), peso adecuado y ejercicio regular.
- Varices: Venas inflamadas debido al fallo de las válvulas venosas de los miembros inferiores, que deberían facilitar el retorno de la sangre venosa al corazón. Pueden originarse por un aumento de la presión en el abdomen (durante el embarazo) o por permanecer mucho tiempo de pie. En ocasiones, se requiere una intervención quirúrgica.
- Apoplejía o accidente cerebrovascular (ACV): Se produce por una interrupción del aporte de sangre a una parte del cerebro. Esta interrupción puede deberse a la obstrucción de un vaso sanguíneo por un coágulo o a la rotura de una arteria, que produce un derrame de sangre. Los síntomas dependen de la zona del cerebro afectada y pueden incluir problemas de movilidad, visión o habla. Si el área afectada es muy grande, puede producirse la muerte.
- Embolia pulmonar: Obturación de una rama de la arteria pulmonar. Se produce por un coágulo que suele proceder de las venas de las piernas. El «síndrome de la clase turista» es una embolia producida por la inactividad en los aviones.
- Aneurisma: Dilatación en forma de bolsa en una pared arterial. Los casos más graves se producen cuando el aneurisma afecta a una arteria cerebral o a la aorta. La rotura del aneurisma puede ocasionar la muerte.
- Infarto de miocardio: Se origina por la obstrucción de las arterias coronarias. Si la obstrucción es parcial, se origina un dolor conocido como angina de pecho. Si la obstrucción es total, se produce un infarto de miocardio, se destruye una parte del músculo cardíaco, y puede sobrevenir la muerte.
2. El Aparato Respiratorio
2.1 Función
- Respiración pulmonar: Proceso por el cual el organismo capta oxígeno del aire y libera dióxido de carbono.
- Respiración celular: Conjunto de reacciones químicas que se producen en las células. Mediante este proceso, los nutrientes se oxidan, liberando energía. En la oxidación de glúcidos y grasas se produce dióxido de carbono y agua. En la oxidación de proteínas se produce amoníaco, que se transforma en urea en el hígado.
2.2 Anatomía
El aparato respiratorio permite obtener oxígeno de la atmósfera y expulsar dióxido de carbono. Está relacionado con el aparato circulatorio, que transporta estos gases entre los pulmones y las células del organismo. Lo forman los pulmones y las vías respiratorias:
- Fosas nasales: Al pasar por ellas, el aire se filtra, se calienta y se humedece.