Agentes Geológicos y Procesos de Modificación del Relieve
Los agentes geológicos son aquellos que modifican el relieve de la superficie terrestre. Pueden ser internos o externos y actúan principalmente mediante tres procesos: meteorización o erosión, transporte y sedimentación.
Agentes externos: Son el agua, la atmósfera, el viento y los seres vivos. La energía necesaria tiene dos orígenes:
- Solar: Causante de los fenómenos atmosféricos que determinan el clima de una región y del desarrollo de los seres vivos.
- Fuerza de la gravedad: Hace descender la lluvia y las corrientes de agua y de hielo, junto con los materiales que transportan.
La acción de estos agentes causa los siguientes procesos:
Meteorización o Erosión
La meteorización o erosión es el primer proceso, que consiste en la alteración de las rocas por procedimientos mecánicos y químicos.
Transporte
Las partículas procedentes de la erosión tienden a ser arrastradas hacia otras zonas más bajas.
Sedimentación
Los productos procedentes de la erosión dejan de ser transportados y se depositan en zonas deprimidas situadas en zonas variables con respecto al origen.
La Meteorización
La meteorización es el conjunto de modificaciones que experimentan las rocas por efecto de entrar en contacto con la atmósfera, con los gases que contiene o con sus características físicas. Se produce sin transporte y, según su efecto sobre las rocas, puede ser de tres tipos:
Meteorización Física
Debido al agua y a los gases atmosféricos. Puede ser:
- Por gelifracción: En climas fríos, el agua que penetra en las grietas de las rocas, al bajar la temperatura, puede llegar a congelarse, aumentando su volumen. Esto somete a la roca a un “efecto cuña”. Al aumentar la temperatura de nuevo, el hielo se licua, disminuyendo el volumen y la presión sobre la roca. Este proceso de congelaciones y deshielos sucesivos acaba ensanchando la grieta y termina por romper la roca.
- Por termoclasticidad: En climas desérticos o de alta montaña existen grandes diferencias de temperatura entre el día y la noche: durante el día las rocas se calientan y se dilatan, aumentando su volumen; durante la noche se enfrían y contraen, disminuyendo su volumen. La repetición de este fenómeno termina por agrietar y romper la roca.
Meteorización Química
Se debe al agua, oxígeno y al CO2; predomina en las zonas cálidas y húmedas, produciendo en las rocas diferentes reacciones, entre ellas la disolución de los minerales salinos, la oxidación de los minerales de hierro y la carbonatación de las calizas.
Meteorización por Seres Vivos
- Efecto cuña: Las raíces de las plantas se introducen entre las grietas de las rocas, que posteriormente las fragmentan.
- Mezcla mecánica: Algunos animales forman galerías y remueven el terreno, favoreciendo la disgregación de la roca.
- Efecto químico de los microorganismos: Las bacterias, hongos y líquenes producen sustancias de carácter ácido que provocan alteraciones químicas en las rocas.
El Suelo
El suelo es el sistema complejo que se forma en la superficie del terreno, resultado de la disgregación de la roca madre, mediante meteorización física y química, y de la actividad de los seres vivos desde que se empieza a formar.
Formación del Suelo
Podemos resumirla en 3 fases:
1.- El suelo se inicia a partir de la roca que forma la superficie, llamada por ello, roca madre. Por la meteorización física y química, esa roca es disgregada, y los fragmentos se desmenuzan liberando minerales y elementos químicos. Los huecos que quedan entre los fragmentos y los minerales se rellenan con agua y aire.
2.- La capa de roca disgregada empieza a ser colonizada por los seres vivos. En primer lugar, líquenes y las plantas más primitivas (musgos), que aportan la primera materia orgánica y, poco a poco, se van incorporando microorganismos, plantas mayores y algunos invertebrados (lombrices, larvas, insectos, etc.) que mezclan los componentes del suelo y lo airean.
3.- Los restos de todos estos animales y plantas sirven de alimento a microorganismos (bacterias, hongos) que los descomponen en sustancias más sencillas, formando una capa de materia orgánica llamada humus o mantillo. Este mantillo, además de proporcionar nutrientes a plantas y animales, retiene el agua y actúa como aislante, evitando las variaciones bruscas de temperatura.
El suelo que se forme variará según sea la clase de roca madre a partir de la que se forme, el clima, el relieve, la cubierta vegetal y la presencia de animales.
Perfil del Suelo
Los suelos bien desarrollados presentan una serie de capas horizontales que se denominan horizontes o niveles, cuyo conjunto constituye el perfil del suelo. Éste permite clasificar los distintos tipos de suelos. Los principales horizontes son:
- Horizonte A: Es el estrato superior, sobre el que se asienta la vegetación. Es muy rico en humus (color oscuro). Su espesor es muy variable, de algunos milímetros a varios decímetros. A veces se distingue una subcapa, O, de restos de plantas y animales sin descomponer del todo.
- Horizonte B: De color más claro, al ser pobre en humus, aunque es rico en sustancias minerales, procedentes de la descomposición de las sustancias orgánicas del nivel superior arrastradas por el agua. Puede llegar a alcanzar un espesor de hasta 1 m.
- Horizonte C: Formado por los fragmentos de la roca madre, mezclados con arenas o arcillas. Su espesor es variable, desde pocos metros hasta más de 30 m.
El espesor de los horizontes y del perfil del suelo varía según la antigüedad, el clima, la vegetación y el tipo de roca madre, y varía desde pocos centímetros hasta varios metros (en climas cálidos y húmedos).
Si un suelo lleva poco tiempo formándose (en un proceso que puede durar siglos) no suelen tener los horizontes diferenciados y suelen ser poco profundos (desde la superficie hasta la roca madre sin alterar), y se les llama suelos brutos. Si, por el contrario, el suelo ha tenido tiempo de desarrollarse, se les llama suelos maduros y suelen ser profundos y con los horizontes bien desarrollados.
Componentes del Suelo
Los suelos están constituidos por cuatro elementos fundamentales:
- Materia orgánica: Procedente de los restos y excrementos de los seres vivos.
- Materia mineral: Compuesta de granos de cuarzo, arcilla, carbonatos, etc., provenientes de la descomposición de la materia orgánica y de la alteración de la roca madre.
- Aire: Muy importante para el desarrollo de los seres vivos. Representa normalmente más del 20% del volumen del suelo.
- Agua: Rellena, junto con el aire, los huecos que quedan entre las partículas minerales y orgánicas. Constituye aproximadamente la cuarta parte del suelo y lleva en disolución distintos tipos de sustancias esenciales para la vida de las plantas, que las toman a través de las raíces.