Planetas del Sistema Solar
Mercurio: rocoso y no cuenta con una verdadera atmósfera.
Venus: atmósfera formada por CO2, la cual crea un enorme efecto invernadero que hace que la superficie alcance temperaturas de alrededor de los 500 grados.
Tierra: es rocoso, con una atmósfera con un 21% de oxígeno. Al estar en su posición en el Sistema Solar, las condiciones son buenas para la vida, con una temperatura media de 15 grados y abundante agua en estado líquido. Tiene un satélite.
Marte: rocoso, con una atmósfera con un 95% de CO2. Tiene agua en estado sólido (hielo) y dos satélites: Fobos y Deimos.
Júpiter: planeta gaseoso formado de hidrógeno y helio. Su fuerte rotación hace que su atmósfera gire muy deprisa y forme bandas paralelas a su ecuador. Tiene 79 satélites, incluyendo Ío, Europa, Ganímedes y Calisto.
Saturno: gaseoso con una atmósfera formada por H y He. Lo que más destaca de él son sus miles de anillos formados por partículas de hielo y roca. Tiene 82 satélites.
Urano: gaseoso, su atmósfera está formada de H, He, amoníaco y metano. Lo que más destaca de él es la inclinación de su eje de giro, que es de 98 grados. Tiene 13 anillos de materiales muy oscuros y 27 satélites.
Neptuno: gaseoso con una atmósfera formada de H, He y metano. Presenta unos grandes remolinos que giran a distintas velocidades. Tiene 5 anillos y 14 satélites.
Vida Extraterrestre
La astrobiología, también llamada exobiología, es una disciplina científica, rama de las ciencias biológicas, que hace uso principalmente de una combinación de las disciplinas de astrofísica, biología y geología para el estudio de la existencia, origen e influencia de la vida en otros lugares del universo, excluyendo a la Tierra. Como no se tienen muestras de vida extraterrestre, lo que se hace es estudiar algunos de los organismos de la Tierra conocidos como extremófilos. Algunos extremófilos viven en lugares muy calientes, mientras que otros viven dentro de las rocas en sitios muy fríos o bien se alimentan de azufre o hierro.
Tectónica de Placas
Pruebas de la Tectónica de Placas:
- Bandeado magnético del fondo marino: las bandas claras y oscuras indican las diferentes intensidades magnéticas que se registran en las rocas del fondo oceánico, así como la escala de tiempo en millones de años en que se producen dichas inversiones. Es asimismo significativo la simetría de este gráfico de investigación, a ambos lados del eje de la dorsal, lo que indica el crecimiento simétrico del suelo oceánico.
- Bandeado cronológico del fondo marino.
- Distribución de volcanes y sismos en franjas o cinturones (límites de las placas).
- La coincidencia de líneas de costa entre distintos continentes.
- La coincidencia de formaciones rocosas en continentes lejanos.
- La continuidad y la separación de ciertas cadenas montañosas.
- Las pruebas paleoclimáticas.
- Las pruebas paleontológicas.
- El paleomagnetismo.
- Distribución global de volcanes y terremotos.
- Medida del desplazamiento de los continentes.
¿Qué hace moverse a las placas?
El motor que es capaz de mover las gigantescas placas son las corrientes de convección que se producen en el manto, corrientes de material rocoso semifundido que al mismo tiempo que transporta materia, transfiere energía calorífica. Se piensa actualmente que afectan a todo el manto.
Evolución Biológica
Condiciones para que un cuerpo tenga vida:
- Un comportamiento cerrado, pero no aislado del entorno. Se necesita una membrana semipermeable = membrana celular.
- Moléculas capaces de procesar las sustancias que entran para obtener energía y moléculas utilizables para construir estructuras = metabolismo enzimático.
- Moléculas que contengan la información necesaria para reproducir el sistema y que perdure = los ácidos nucleicos.
Las primeras vesículas que sobrevivieron pudieron convertirse en protocélulas y estas en las primeras células (LUCA), que serían procariotas. Según la hipótesis de la endosimbiosis, la célula eucariota surgió a partir de varios tipos diferentes de células procariotas que vivieron juntas, unas dentro de otras, en simbiosis. Una aportó las mitocondrias (para la respiración celular), otra los cloroplastos (para la fotosíntesis) y otra los flagelos (para la movilidad).
Sobre el origen del núcleo existen diversas hipótesis:
- Hipótesis exoplásmica: Es que una bacteria formara una segunda membrana por invaginación, quedando la interna para originar orgánulos celulares membranosos como el núcleo. Se apoya en que hay unas bacterias acuáticas (Planctomycetes) que poseen algunas estructuras internas membranosas y con poro, además de semejanza moleculares con células eucariotas.
- Hipótesis endocítica: Origen por endocitosis de unas bacterias que engullen a otras. Las comidas dan origen, con sus membranas, al núcleo celular.
Las primeras células deberían ser procariotas anaerobias y heterótrofas, si nos atenemos a la hipótesis de la sopa primitiva, o quimioautótrofas, si hacemos caso a la hipótesis submarina. Debió de ocurrir hace unos 3800-4000 Ma, por los restos carbonosos encontrados en las rocas más antiguas del planeta, en Groenlandia. Hace 2500 Ma se formarían las bacterias fotoautótrofas, por las formaciones de hierro bandeado oxidado en rocas de unos 2500 Ma. Hace unos 1500 Ma harían su aparición las células eucariotas, con núcleo verdadero, las cuales originaron las diversas formas de protistas, hongos, animales y plantas.